Quabit-Valladolid, un partido casi de transición
09/12/2011 - 19:57
Nadie quiere renunciar a una posible sorpresa esta tarde ante el Cuatro Rayas, pero entre que el rival es de los grandes del balonmano nacional, que el equipo alcarreño tiene las bajas de Castellá y Sergio Valles y que las dos próximas citas para el Quabit son casi dos finales, en el conjunto de Guadalajara se afronta este choque con cierta tranquilidad y con la mirada puesta un poco más allá. Lo importante es que no tengamos lesionados y que intentemos plantar cara al rival. Son las consignas del técnico Fernando Bolea. La jornada será solidaria ya que se recaudarán alimentos con la colaboración de Cáritas Diocesana.
Sergio Valles será finalmente baja para el partido de esta tarde. El Comité de Competición ha esperado casi hasta el último momento para acordar la sanción de un partido al lateral del Quabit tras ver la tarjeta roja en el último encuentro. Será, junto a Mateu Castellá continúa lesionado las dos bajas del Quabit para esta tarde en la visita del Cuatro Rayas Valladolid. El equipo alcarreño se marca el choque con la intención de ser competitivo. Y es que la superioridad de los pucelanos es notable. Además, las dos bajas del Guadalajara y sobre todo el cierre de primera vuelta que afronta el Quabit, con dos rivales como Huesca miércoles, a las 21 horas y Antequera sábado, a las 18 horas, en el Multiusos, partido en el que se presentarán las Escuelas del club alcarreño Antequera, hace que el cuadro alcarreño no arriesgue lo más mínimo.
El Quabit se mide a un rival muy poderoso que lucha por estar en la Copa Asobal de León, para ello debe asegurar esa cuarta plaza en la clasificación que ahora posee. En sus filas cuenta con el exseleccionador campeón del mundo, Juan Carlos Pastor, y jugadores de la talla de José Manuel Sierra, portero con más paradas de la categoría -153- o el extremo francés Guillaume Joli, máximo artillero con 77 goles. Además de Eduardo Gurbindo, Angel Romero, Ivan Nikcevic, Davor Cutura o Marko Krivokapic, entre otros. Un equipazo ante el que los alcarreños intentarán ser competitivos y dar una buena alegría a la afición.