Rotos los sueños de Azuqueca y Dínamo de jugar en Nacional

16/06/2013 - 22:18 Redacción

Ni el Azuqueca ni el Dínamo de Guadalajara fueron capaces de superar la eliminatoria que hubiera supuesto su ascenso a la Liga Juvenil Nacional. Mientras unos no fueron capaces de mantener su ligera ventaja en La Roda, los otros certificaron el pase de un Industria que tenía todo de cara después del 0-2 que consiguió en la ida.
 
 
  Los rojinegros defendían un 3-2, que a la postre resultaría poca renta. Y es que, la vuelta a domicilio resultaría una verdadera trampa mortal. En parte, porque los rodeños se volcaron con su equipo y le llevaron en volandas hacia la Liga Nacional. Si a eso añadimos que en la primera media hora, Alberto Iglesias, entrenador azudense, tuvo que hacer dos cambios obligados, Pimpo por problemas musculares en el minuto 7 y Mario por un mareo, el ascenso se complicaba por momentos. Y más después del gol de Juan Manuel al filo del descanso. Un tanto que obligó al Azuqueca a reaccionar, irse a por el partido y desguarnecer la defensa. Sin grandes opciones visitantes, Miguel Lafuente, con dos goles, sentenció el duelo en los compases finales y enterró las opciones de ascenso del filial del Azuqueca.
 
   Por su parte, el Dínamo Guadalajara apeló a la heroica para conseguir el ascenso en casa del Industrias. Sin embargo, la empresa resultó muy complicada y no solo por el 0-2 que tenía que superar, también por el equipo que tuvo enfrente y que supo medir los tiempos de la eliminatoria. Así las cosas y pese al esfuerzo titánico de los jugadores alcarreños, el tiempo corría en su contra y en beneficio de los albaceteños, que desbarataban una y otra vez los movimientos e intentonas visitantes. Con gran solvencia, el Industria selló su clasificación a Liga Nacional Juvenil en el minuto 86 de la mano de Pascual Picazo. Tanto el juvenil azudense como el alcarreño tendrán que esperar a la próxima temporada para conseguir su asalto y ascenso a nacional. Con esa idea, ambos clubes cerraron este sábado la temporada. Una campaña que, pese a éste último traspié, fue un verdadero éxito.