Tommy Robredo no puede con el saque mortífero de Del Potro

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: EUROPA PRESS
El tenista español Tommy Robredo puso fin a su andadura en el prestigioso torneo de Roland Garros, segundo ‘Grand Slam’ de la temporada, después de perder en los cuartos de final de la competición frente al argentino Juan Martín del Potro (6-3, 6-4 y 6-2), quién estuvo especialmente acertado con su servicio en las dos horas que duró el enfrentamiento.
La eliminación del gerundense supone el adiós al completo de la colonia española en París, tras la precipitada despedida de Rafael Nadal y Fernando Verdasco el pasado domingo. Robredo apenas dio pie a la esperanza en su choque ante Del Potro. El de la ‘Legión’ le maniató desde el comienzo rompiendo su servicio en la primera manga con 4-2 a su favor. Ahí, metió la directa para hacer el 6-3 definitivo con facilidad.
El tenista de Tandil le machacó con su saque, el cual acababa en punto directo o situación comprometida para Robredo. Además, Del Potro construyó las bases de su victoria para confirmarla en el segundo con una derecha espectacular, a la que ya le espera Federer en la siguiente ronda.
Porque fue ahí, en ese segundo acto ,cuando Robredo pudo haber cambiado el rumbo del encuentro. El de Hostalric, tras apuntarse el juego inicial con su servicio, dispuso de hasta seis bolas de ‘break’ en el segundo para ponerse 2-0, algo que no consiguió por el cañón que tuvo en su brazo derecho ‘Delpo’.
Los peloteos larguísimos, para colmo, terminaron de desgastar a un Robredo que iba a menos por la potencia del argentino, que acabó por sumar el segundo set tras una nueva rotura. Una potencia que sirvió para dejarle a un lado del camino y para sentenciarle en la tercera manga después de agotar hasta cuatro bolas de partido.
Del Potro aseguró, con dos nuevas ‘breaks’, llevar el choque al 5-2 con su saque, algo que no dejar pasar. El jugador argentino lo logró a la quinta, pero accedió a ‘semis’, las primeras en su carrera deportiva de un ‘Grande’. Un hito que no lograba un argentino desde 2006, cuando David Nalbandián ejerció como máximo exponente del tenis ‘legionario’.

Medina-Ruano, en la final
Por otro lado, las españolas Anabel Medina y Virginia Ruano, defensoras del título, se clasificaron con esfuerzo para la final al superar en semifinales a Cara Black y Liezel Hubel. Las subcampeonas olímpicas volvieron a hacer gala de su superioridad sobre tierra batida y doblegaron en tres mangas a las número uno del mundo por 7-5, 5-7 y 6-2 después de dos horas y 51 minutos de juego.
La torrentina y la madrileña tuvieron que echar mano de sus mejores armas. Después de haber servido para forzar el ‘tie-break’ en el segundo set y encajar una rotura saltaron a la cancha en la tercera manga con otra mentalidad.
Medina y ‘Vivi’ practicaron un juego más agresivo que les permitió convertir dos ‘breaks’ tempraneros (3-0). A remolque, sus rivales no supieron cómo recortar distancias y permitieron a las españolas clasificarse para su segunda final consecutiva.