Un final de traca para la primera temporada del Depor en Segunda

El Deportivo Guadalajara cerró la temporada sorprendiendo al todopoderoso Valladolid tras imponerse por 1-3 al conjunto de Miroslav Djukic, en una tarde que empezaron perdiendo desde muy temprano y acabaron ganando gracias al buen hacer de sus hombres de ataque, que sacaron tajada al máximo las pocas ocasiones que dispusieron logrando batir al guardameta Jaime tres veces.

De inicio, el Valladolid saltó al césped del José Zorrilla fiel a su estilo, con las ideas claras y buscando la meta de Saizar. Tanto es así que cuando apenas habían transcurrido seis minutos de juego, y en la primera aproximación blanquivioleta al área del Guadalajara, Óscar aprovechó un gran pase profundo para presentarse solo ante la meta alcarreña y batir por bajo al guardameta en una definición propia de la calidad que atesora el volante pucelano.

El conjunto local continuó con su mismo esquema de juego, aunque con el paso de los minutos se fue diluyendo, mientras que el Depor se estiraba tímidamente ante la pasividad violeta. No obstante, y a pesar de la relajación anfitriona, el Valladolid volvía a atacar la portería de los de Carlos Terrazas y, en el minuto 17, Nafti estrellaba en el lateral de la red un gran remate tras recibir el balón rechazado de un disparo previo de Jofre.

Fue entonces cuando llegaron los mejores minutos del Guadalajara ya que, poco a poco, se fue adueñando de la zona ancha del terreno de juego, gracias, sobre todo, a las imprecisiones en el pase de un Valladolid que daba por bueno el resultado hasta ese instante. Ello permitió a los alcarreños adelantarse en su juego en el centro del campo, con aproximaciones aisladas al área de la portería contraria. En una de ellas, cuando cruzábamos la primera media hora de juego, el conjunto morado –ayer de naranja– conseguía el premio a su trabajo y Javi Soria, en un acción a balón parado, devolvía la igualdad al marcador tras cabecear un gran centro de Víctor desde la izquierda.

Mientras los foráneos ponían las tablas, el Valladolid acusaba el gol encajado con un juego un tanto aletargado y sin trenzar su fútbol de toque y desmarques de rupturas en los últimos metros. De hecho, en los instantes finales de la primera parte, el Deportivo se mostró más compacto que su rival ante un candidato al ascenso completamente desconocido y con la mente más puesta en Balaídos que en el encuentro que les medía a un cuadro que ya había hecho los deberes y que, a base de orden y sin cometer errores en el pase, fue capaz de encerrar a su rival en su área.

Bien plantados

Tras el descanso, los futbolistas de Carlos Terrazas saltaron al césped con la idea clara de sorprender a un Valladolid que, sin embargo, se mostraba más enchufados en los instantes finales de la primera parte y, cuando apenas habían transcurridos cinco minutos de la reanudación, el Depor volvía a golpear en la línea de flotación pucelana. Cristian, pasado el minuto 50, se marchara en velocidad de su marca y acabara cruzando y batiendo a Jaime con un gran remate que colocaba en ventaja a los alcarreños ante unos pucelanos que no daba crédito a lo que estaba pasando sobre el tapete. En medio del desorden defensivo vallisoletano, los deportivistas vieron un filón en la zaga local y, diez minutos más tarde, acontecería el tercero del cuadro de Terrazas. Víctor Fernández, al botar una falta directa, hacía el tercero de los ayer anaranjados dejando prácticamente sentenciado el choque para los de Carlos Terrazas.

A partir de entonces, y ya con todo perdido, el Valladolid sacó la artillería pesada en ataque con la entrada de Nauzet primero y Sisi después en busca de la heroica, pero los alcarreños seguían a lo suyo. En el minuto 68, el recién incorporado Ryan Harper cruzaba en exceso una ocasión cantada. Un minuto más tarde reaccionaba el Valladolid cuando Javi Guerra cabeceaba con la coronilla un balón que se perdió sobre la línea de fondo sobre la portería de Saizar.

Tras los intentos de los de Miroslav Djukic, el Depor lo tenía claro y, con una presión asfixiante en la salida del balón, neutralizaba la creación blanquivioleta y dejaba prácticamente en nada el triunfo futbolístico de los anfitriones. Aún así, en el minuto 77, de nuevo Javi Guerra a punto estuvo de disminuir distancias a no ser que su disparo se marcharía justo al poste izquierdo de Saizar.

En pleno acoso local, en el minuto 82, Alberto Bueno botaba una falta en la que el propio meta alcarreño tenía que emplearse a fondo para evitar el peligro del Valladolid, que relajó la intensidad de su fútbol al final. Los de Carlos Terrazas aprovecharon la oportunidad para intentar aumentar su renta y, a falta de tres minutos, Antonio Moreno casi conseguía el cuarto de no ser por la intervención de Jaime. En definitiva, ‘sorpresón’ y final de traca para la primera temporada del Depor en Segunda División.