Un Quabit mermado se agota al final
07/02/2013 - 10:21
El Quabit Guadalajara encajó su cuarta derrota consecutiva, en esta ocasión esperada, ante un Atlético de Madrid que quiso encarrilar el partido en los primeros minutos, pero que tuvo que esperar a los últimos instantes del primer periodo para derrocar a un rival desprovisto de profundidad de banquillo y que no existió en los últimos 20 minutos.
Se notó a la larga que los alcarreños estaban mermados. Efectuaron su primer cambio en el minuto 19. Bozalongo sustituía a un tocado De la Rubia. Y es que los del Henares se presentaron en Madrid sin centrales, con Sergio de la Salud lesionado. Por su parte, los del Manzanares no pararon de rotar. Sus titulares no entraron en liza hasta bien mediada la primera parte cuando el electrónico no le sonreía.
Al 4-1 de salida de los dos primeros minutos por parte rojiblanca fue contrarrestado por el Quabit Guadalajara en cuanto Gómez Lite efectuó dos paradas consecutivas y el 6-0 mermado de los ayer de negro apretó las clavijas. Disminuida esa fogosidad inicial de los locales, los visitantes contestaron con un 0-4 igualando el marcador en el minuto 7 (4-5). A partir de entonces, el tanteador fue parejo (uno arriba, uno abajo) hasta el parcial de 0-5, y en inferioridad madrileña, justo antes del descanso (18-14) que mató el partido.
La manifiesta superioridad colchonera no se palpaba en el luminoso.
Quizás por cierta suficiencia, quizás por los numerosos postes con los que se encontraron, pero lo cierto es que la efectividad alcarreña estaba de dulce. Bozalongo, por un momento, hizo olvidar a los que no estaban y el brazo de Milan Rasic estaba en plena forma. Se goleaba por el interior y se aguantaba una batalla física que acabó pasando factura.
En la segunda parte, Mateo Garralda dio entrada a Tremps para oxigenar a los suyos, siguió apostando por rozar el pasivo en ataque y el Quabit Guadalajara llegó a colocarse a dos (20-18, m. 35).
Y se aguantó con esa renta con ilusión y con De la Rubia tirando del carro (20-18, min. 41), justo cuando Fotenla marrase el único siete metros del partido. El Atlético, relajado, acabó machacando desde cualquier faceta. Todo ello sin contar que se estuvo 14 minutos sin anotar y que se utilizó portero jugador. Tras un alley hoop que culminó Balic y que levantó al desangelado coso taurino, jugó sus minutos Nacho Plaza y Parra, que terminó mal del tobillo, antes de que el encuentro concluyese con el claro 35-23 final.