Una alegría y otra decepción para los clubes guadalajareños

20/05/2014 - 16:54 Ana G. Hernández

El Marchamalo consiguió dar la gran nota positiva para la provincia en el Grupo II de Primera Autonómica Preferente al proclamarse campeón de la categoría. La parte negativa la consumó el Alovera, al verse apeado de esta división después de una temporada de más sombras que luces.
Y es que, los aloveranos no pudieron remediar su mal comienzo de la campaña 2013/14, a pesar de su cambio en el banquillo, y solo pudieron hacer las cosas bien cuando el descenso a Primera Autonómica estaba más que consumado. No en vano, en los últimos partidos, sin la tensión competitiva, se pudo ver la mejor versión del Alovera, sin nervios sobre el terreno de juego y con la precisión que tanto añoró durante toda la temporada.

El Alovera ya conoce su futuro, pero el que todavía vive en la incertidumbre es el Horche. Y es que, los alcarreños han sumado 42 puntos colocándose quintos por la cola. Sin embargo, su hazaña no les permite sentirse totalmente a salvo. El motivo, el descenso a Tercera División de La Roda. Un contratiempo que no debería de afectar a los horchanos, puesto que en caso de que el cuadro manchego arrastre a varios equipos al descenso de categoría, no deberían de ser de la partida. No en vano, descendería el quinto por la cola con menos puntuación de los dos grupos de Preferente. En esta caso, sería el Tobarra el que con sus 37 puntos promocionaría a Primera Autonómica. No obstante, cualquier tipo de conflicto o problema se solucionaría en el caso de que el Puertollano consiga el ascenso a Segunda División B. Así las cosas, el Horche hubiera estado salvado sobre la campana, después de que los de Carlos Merino consiguieran deportivamente su salvación venciendo en casa del Torrijos (0-3). Pero entonces, el club toledano impugnó el partido por alineación indebida del cuadro alcarreño, puesto que Merino dispuso a un juvenil sin licencia para jugar sobre el terreno de juego.

Por su parte, El Casar y el Guadalajara B consiguieron el objetivo de la temporada, mantenerse en Preferente. Los primeros lo lograron a falta de dos jornadas para la conclusión de la temporada, mientras que los morados siempre han estado asentados en la zona templada de la clasificación. Sin necesidad de sufrir por el descenso y con la intención de dar más de sí la próxima temporada. Los de Chito han cuajado una fantástica campaña en la que incluso fueron los primeros en doblegar al ‘todopoderoso’ Marchamalo de Manolo Andradas. Además, los morados fueron cómplices de la salvación de El Casar en una última jornada en la que cayeron por la mínima ante el cuadro casareño. Una victoria que sirvió a los de Alfonso Gutiérrez para alejarse de ese quinto lugar por la cola, que siempre tiene más peligro que tener un colchón respecto del descenso.