2017, un año para la esperanza
Optimismo moderado respecto al futuro en este inicio de año.
El optimismo moderado respecto al futuro en este inicio de año por las expectativas de realización de importantes proyectos para nuestra provincia que, o bien se harán realidad a lo largo de 2017 o al menos avanzarán de manera considerable. A medio plazo, por ejemplo, ese campus universitario que iniciará el curso 2020/2021 en la zona de Las Cristinas y que supondrá un revulsivo dinamizador de la vida en nuestra ciudad. Mucho antes, ese imprescindible Hospital que permitirá una mejor atención a los pacientes por las nuevas instalaciones con más habitaciones individuales, mejores servicios e incremento de especialidades que disminuirán las derivaciones a otros hospitales. Las actuales dependencias son insuficientes y no dan abasto a la demanda existente a pesar del prestigio de los profesionales, punteros y muy reconocidos en muchas materias, y del esfuerzo inversor en nuevas tecnologías en el último año por el Gobierno regional. También saturada está la Justicia que precisa de más juzgados, mayor concentración de los órganos ahora dispersos- 16 juzgados en la actualidad-, instalaciones más modernas y más plantilla. El Palacio de Justicia, cuyas obras ya se han iniciado, es una solución y avanza, pero su futuro al igual que otras infraestructuras dependerá de las consignaciones que se realicen en el Presupuesto General del Estado de 2017. Hacia ellos miraremos también para saber si siguen las obras, casi paradas, del Parador de Molina o se acometen las muy urgentes para el abastecimiento de los municipios ribereños. Son proyectos estancados que necesitan de un impulso y que son claves para el desarrollo de zonas poco favorecidas. La provincia contará, por lo menos, con las inversiones de una Diputación comprometida, de manera especial con las carreteras, los caminos y las infraestructuras hidráulicas. Será realidad, por otra parte, en este año el segundo centro de salud de Azuqueca, un colegio en Yebes y un nuevo instituto en Alovera, infraestructuras tan demandadas como necesarias. También la Ciudad del Fútbol en Guadalajara. La mayor estabilidad política y un escenario económico más alentador en el que se prevé un nuevo crecimiento, hará que 2017 sea un punto de inflexión hacia un tiempo de realidades o hechos. Año para la esperanza.