Dificultades y necesidades del empresariado

Nuevo éxito de organización y desarrollo de la gala empresarial de la provincia de Guadalajara, la entrega de los premios a la Excelencia Empresarial, cita que toma el pulso cada año a la situación presente y perspectivas de futuro. Una vez más, con galardonados de diferentes sectores productivos y de servicios, de grandes, pequeñas y medianas empresas, de distintas zonas de la geografía provincial, se puso de manifiesto el talento, la imaginación, el esfuerzo, la valentía de los hombres y mujeres emprendedores, prestadores de un servicio social, generadores de empleo y riqueza, agentes fijadores de población en el núcleo rural. Detrás de cada proyecto, aunque hoy se haya convertido en una multinacional, hubo en su origen un emprendedor, y hoy podemos estar orgullosos del tejido empresarial de la provincia que está sabiendo adaptarse a los tiempos, sobrevivir a una pandemia, luchar contra las consecuencias de una guerra, hacer frente a una presión fiscal a nivel nacional que no sufren en otros países europeos, con formación, ilusión, capacidad, mucho trabajo, y sin la ayuda ni el reconocimiento que merecen, estando su figura, por algunos, denostada, devaluada, incluso maltratada, cuando es vital para el desarrollo, el crecimiento y el futuro de la sociedad. El mensaje desde el empresariado alcarreño fue claro y su sentir generalizado. Gratitud al Ayuntamiento, a la Diputación y al Gobierno regional por su compromiso, su política de acuerdos, unidad, trabajo conjunto con ellos y con los agentes sociales, cristalizado en realidades como Impulsa Guadalajara, en la creación de un marco de estabilidad que está impulsando la llegada de grandes empresas, pero lamento por un ejecutivo nacional que provoca incertidumbre, inseguridad jurídica, que debiendo gobernar para todos ha estigmatizado a un sector que requiere en esta crisis internacional de su respaldo. Toque de atención que esperemos lleve a la reflexión.