Disconformidad con el propio cuerpo


En la literatura científica el término disforia de género se utiliza para definir la percepción  de rechazo que tiene una persona respecto al hecho de ser hombre o mujer.

La disconformidad con el propio cuerpo y la subjetividad cambiante es propia de la pubertad y la adolescencia. Esta incidencia está creciendo exponencialmente y se observa que la demanda se ha desplazado de menores en etapas preescolares a la pubertad y adolescencia. Entre otras razones que se dan para explicar este fenómeno está el desacuerdo de las niñas con los estereotipos “femeninos” impuestos, la violencia y el acoso sufrido por las adolescentes, y la no aceptación y discriminación de la orientación sexual homosexual. La identidad de los menores es cambiante y de evolución compleja.(1)

Según el catedrático de Psicología, Enrique Echeburúa, “el concepto de nacer en un cuerpo equivocado puede ser muy nocivo porque nacemos en el cuerpo que nacemos y debemos aprender a aceptarlo, hecho que no necesariamente quiere decir que no se puedan cambiar cosas, pero no porque el cuerpo fuera equivocado sino porque no nos sentimos cómodos con algunas de sus características”.

La explicación más realista, nos indica el catedrático de Psicología Marino Pérez,  es que “sería el propio activismo queer con su poder de influencia (en la política, en las instituciones educativas y sanitarias, en el lenguaje, en la opinión pública a través de las redes sociales frecuentadas por niños y adolescentes, etc.) el que logró convertir la orientación sexual transgénero en la opción más aceptable, cool, transgresora con la que se identifican los adolescentes, por encima de otras identificaciones como ser lesbiana o gay. En cierta manera, esta nueva ortodoxia que impone la ideología transgénero o queer es homofóbica. Todo esto habría que entenderlo en el contexto de la actual devaluación de la natalidad, así como de las relaciones heterosexuales en las nuevas generaciones”.

En la literatura científica, el término disforia de género se utiliza para definir la percepción de rechazo que tiene una persona respecto al hecho de ser hombre o mujer. En niños y adolescentes la disforia de identidad de género es una entidad clínica compleja, que requiere una correcta respuesta a la demanda que expone el paciente, y cuyo resultado es variable e incierto, pues solo unos pocos casos serán transexuales en la vida adulta. (2)

Son relevantes los criterios diagnósticos del DSM-V, que incluyen la sustitución del término «trastorno de identidad de género» por «disforia de identidad de género», y con ello, la eliminación parcial de la anterior patologización. (3)

Si bien la transexualidad no es una enfermedad, es probable que el problema de estos adolescentes sea realmente otro tipo de trastorno que, sin acompañamiento clínico, como pretende el Gobierno, puede quedar sin diagnosticar, opina el psiquiatra Celso Arango.(4)

Nos insiste en que existe una gran cantidad de jóvenes que padecen trastornos mentales y que en un momento concreto dicen ser trans. Se agarran a ello como una salida temporal.(5)

Es necesario realizar evaluaciones cuidadosas e individualizadas con seguimiento longitudinal en población infanto-juvenil, mediante un abordaje multidisciplinar. A pesar de ello, dadas las consecuencias parcial o totalmente irreversibles de los tratamientos hormonales y quirúrgicos, y la persistencia variable e incierta de este diagnóstico en adolescentes, no todos los autores se muestran favorables a establecer diagnósticos definitivos a edades tempranas.(6)

Habría que complementar la entrevista clínica con otras técnicas como diarios de actividades cotidianas, registros de ítems descriptivos del estado de ánimo del menor, o valoraciones del malestar que experimenta en su día a día. Estos exponen su utilidad para indagar sobre su actitud frente a la sexualidad (orientación sexual, compulsividad sexual, experiencias sexuales y significado subjetivo de la sexualidad) y su funcionamiento emocional y cognitivo (personalidad, autoestima y autoconcepto). (7)

En cuanto a mis criterios en este tema como autor pueden consultar el libro Cuando la salud mental quiebra editado en Díaz de Santos, que aborda este complejo tema sin adscribirlo a ningún tipo de clasificación nosológica.

Recientemente hemos coordinado una webinar desde RECURRA GINSO que lleva por título “Identidades sexuales en la infancia y la adolescencia: diversas perspectivas” y que puede ser consultado en https://recurra.es/eventos-recurra.

 

(1).Grup d’ètica CAMFiC (2022). Protección a menores con disconformidaddisidencia de sexo-género. Blog del Grupo de Ética de la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria. https://ecamfic. 

 (2)Sánchez Lorenzo, I., Mora Mesa, J. J., & Oviedo de Lúcas, O. (2017). Atención psicomédica en la disforia de identidad de género durante la adolescencia. Revista De Psiquiatría Y Salud Mental, 10(2), 96-103.

 (3) Ibidem

 (4)https://www.libertaddigital.com/espana/politica/2022-07-08/ley-trans-celso-arango-esta-habiendo-un-incremento-bestial-de-adolescentes-que-asumen-ser-trans-sin-serlo-6914395/

  (5)Ibidem

  (6)Fernández-García, O., Ballester-Arnal, R., Iglesias Campos, P., Morell-Mengual, V., & Gil-Llario, M. D. (2018). Transexualidad y adolescencia: Una revisión sistemática. INFAD (Barcelona), 2(1), 91

(7) Fernández-García, O., Ballester-Arnal, R., Iglesias Campos, P., Morell-Mengual, V., & Gil-Llario, M. D. (2018). Transexualidad y adolescencia: Una revisión sistemática. INFAD (Barcelona), 2(1), 91.