El Isover Azuqueca recupera sus señas de identidad
Victoria importantísima de un Isover Azuqueca necesitado de recuperar sensaciones y el juego que le caracterizó en el primer cuarto de la temporada. El 81-75 ante el Casvi deja un gran sabor de boca para terminar el año.
Fue un partido muy intenso en el que Eurocolegi Casvi no dejó de luchar desde el salto inicial hasta la bocina final, lo que hizo que el Isover Azuqueca tuviera que tirar de casta y raza para llevarse el partido por 81-75, con parciales de 16-22, 23-16 (39-38 al descanso), 15-13 (54-51) y 27-24 (81-75).
Durante todo el encuentro los azudenses mostraron muchos despistes y desajustes defensivos, lo que fue un lastre. Eso propiciaba el acercamiento de Casvi que no solo igualaba el marcador, sino que además llegó a alcanzar su mayor ventaja. (13-20) a dos minutos para terminar el primer cuarto.
En el segundo cuarto, los del Isover Azuqueca castigaban la zona visitante y conseguían reducir distancias, logrando un 25-25.
Marino Rodríguez puso en la cancha a Mous Barro para intentar asegurar el rebote, pero el despiste defensivo seguía por parte local, aunque en ataque se mostraba más acertado. El Casvi conseguía mantener distancias cortas en el marcador, pero un ligero arreón local, hacía que se llegase al descanso con un punto de ventaja pata los locales: 39-38.
Tras el descanso, la salida de vestuarios afectó más a los locales, lo que aprovecharon los visitantes para lograr un parcial de 0-5, que les hacía mantener la ventaja en el marcador. Pero el Isover Azuqueca no bajaba los brazos y un parcial de 8-0, les hizo ponerse por delante en el marcador (47-42) a los cinco minutos de cuarto y 54-51 al final.
En el último parcial, el Isover Azuqueca tiró de casta y calidad para hacerlo. Apoyados por una afición espectacular como siempre, los locales consiguieron irse con una ventaja de 7 puntos 68-61 a los cinco minutos. Las ganas y la ambición de Azuqueca regalaron un minuto de oro a los aficionados de La Paz que se pasaron todo el minuto 6 de este cuarto levantados de sus asientos ante el aluvión de triples consecutivos del equipo. Cinco seguidos, dos de Carlos Calvo, dos de Mike Young y uno del acertado Luis Valera, que tampoco se quería perder el festival anotador.
En los últimos cuatro minutos los del Isover supieron mantener la distancia hasta el 81-75.