Un pacto muerto y con interrogantes
La muerte anunciada por Podemos del pacto de investidura por el cual Emiliano García-Page fue nombrado presidente de Castilla-La Mancha deja a la región en una situación delicada, cuanto menos.
La muerte unilateral anunciada por Podemos del pacto de investidura por el cual Emiliano García-Page fue nombrado presidente de Castilla-La Mancha deja a la región en una situación delicada, cuanto menos. En un desalentador panorama nacional ante la falta de un gobierno nacional, y cuando el PSOE está inmerso en su reorganización interna, en Castilla-La Mancha se abren ahora muchos interrogantes de cara al futuro inmediato. ¿Qué pasará con los presupuestos de 2017? ¿Y con el resto de medidas que dependen de ellos? Desde algunos ámbitos ya se alerta sobre las consecuencias de la ruptura de este pacto. El sindicato CSIF, por ejemplo, advertía sobre la incertidumbre que se cierne en asuntos tan importantes como Oferta de Empleo Público, la recuperación de salarios y derechos laborales de los empleados públicos, los problemas crónicos en sectores clave como educación y sanidad, etc. En Castilla-La Mancha estamos en un periodo clave de negociaciones en el ámbito laboral, educativo, sanitario o económico, y la ruptura del pacto por parte de Podemos hace temer que se puedan producir bloqueos legislativos. El propio presidente, Emiliano García-Page, adelantaba que sin la aprobación del Presupuesto de 2017, podrían ponerse en riesgo medidas como la puesta en marcha de una renta básica laboral, 46 grandes obras en materia educativa, la contratación de 206 interinos más, que estos puedan cobrar dos semanas más que ahora, que se recupere paulatinamente el 1,5% de los sueldos de los trabajadores de la administración pública que recortó el anterior Ejecutivo regional, que se puedan realizar 200.000 pruebas diagnósticas más, recuperar las ayudas para pacientes celíacos, atender a 60.000 pacientes más de los previstos, incrementar en 5.000 el número de intervenciones quirúrgicas, o la continuidad del Plan de Empleo que impulsa el Gobierno autonómico. Y aunque confía en la solidez de las cuentas que se preparan para el próximo ejercicio, de momento todo está en el aire, en un aire que viene precedido de aromas de tormenta. Esperemos que se despeje antes de llegar a tierra.