El Azuqueca dice adiós a su imbatibilidad en el San Miguel
El Azuqueca sufrió la primera derrota en su campo del San Miguel ante sus aficionados después de perder 0-2 ante el Villarrobledo. Lo hizo con dos goles de los llamados ‘psicológicos’, en el descuento de la primera mitad y en los inicios de la segunda parte, y ambos de Carmelo, en un flojo partido de los rojinegros.
El Azuqueca rompe así su buena racha de resultados en su campo, donde permanecía invicto hasta este domingo y ahora, tras esta derrota, encadena ya cuatro partidos seguidos sin ganar. Los rojinegros se alejan de la zona media de la tabla y coquetean con los puestos de descenso.
Todo ello después de un partido pobre del Azuqueca. Fueron precisamente los propios errores de los rojinegros los que les condenaron a la derrota ante un Villarrobledo que los supo aprovechar y no perdonó cuando tuvo la oportunidad de hacerlo.
Y Jimmy paró un penalti en la primera mitad
La igualdad predominó durante la primera mitad, aunque con el Villarrobledo mucho más certero en las pocas aproximaciones de peligro de que dispuso. La lucha y la disputa por cada balón en el centro del campo imperó en unos primeros compases sin apenas acercamientos a las áreas.
Sin embargo, fue el Villarrobledo el que lo intentó primero, con un potente lanzamiento de Iván Garrido desde la frontal a los diez minutos, que despejó Jimmy, al igual que el rechace del propio delantero del conjunto albaceteño en una buena doble intervención del guardameta rojinegro.
Poco a poco el Villarrobledo fue adueñándose del balón comenzando a llegar con mayor peligro al área del Azuqueca, pero los rojinegros se mostraban muy seguros y contundentes en defensa, intentando salir a la contra, aunque el buen repliegue de los roblenses frenaba dichas transiciones.
En el ataque estático, los de Juani intentaban mover el balón a las bandas, pero no terminaban de acertar en el último pase. Demasiadas imprecisiones.
En el minuto 19 se produjo la jugada del penalti tras una internada de Leomar por la banda izquierda, que centraba al segundo palo donde se encontraba Iván Garrido para rematar y Jimmy le derribó. La pena máxima fue lanzada por Carmelo en el minuto 20, ajustando a la izquierda de Jimmy, pero éste estuvo atento para detener el lanzamiento.
El Azuqueca se había salvado del 0-1 pero estaba jugando con fuego. No obstante, el partido continuó con la misma tónica de igualdad y un Azuqueca que intentaba sin éxito todas las vías posibles para penetrar y desequilibrar a la ordenada defensa del Villarrobledo. La intensidad en la disputa del balón fue en aumento en el tramo final de la primera mitad con continuas faltas, que frenaban el ritmo.
A pesar de ello, el Azuqueca no dejó de intentarlo, presionando la salida de balón para recuperar el esférico, aunque el Villarrobledo apenas tuvo problemas para iniciar el ataque, aunque abusando también del patadón y del juego aéreo.
Sin embargo, cuando todo parecía indicar que ambos equipos enfilarían el túnel de vestuarios con empate sin goles, y ya en el tiempo de descuento, una jugada por la banda derecha del Villarrobledo finalizó en el 0-1, obra de Carmelo, quien estuvo atento para rematar un centro al segundo palo desde la banda derecha. Jarro de agua fría para un Azuqueca al que le faltó algo más de intensidad en sus laterales para impedir que el Villarrobledo percutiera por las bandas con la facilidad que lo hizo. De ahí nacieron las jugadas del penalti errado por los visitantes y el gol en las postrimerías del primer tiempo.
La sentencia cortó calquier reacción
En el descanso, Juani optó por dejar en el banquillo a Borja y dar paso a Rober para dotar de mayor profundidad al ataque rojinegro. Y lo cierto es que, al primer minuto, el ‘9’ azudense ya tuvo su primera presencia de peligro en el área, aunque no terminó de armar el disparo.
El Azuqueca salió con mucha más mordiente ofensiva y Vega tuvo en su cabeza el empate en el minuto 50 después de que su remate, tras un saque de esquina de Monroy al segundo palo, lo repeliera precisamente el poste.
E inmediatamente después, en el minuto 51, llegó el 0-2 en un desajuste defensivo de los rojinegros. Carmelo avanzó solo bastantes metros desde el centro del campo hasta el área para marcar ante la salida de Jimmy. De nuevo, y cuando parecía que el Azuqueca estaba en condiciones de igualar, Carmelo acabó con las ilusiones de los rojinegros de un plumazo.
Muy cuesta arriba se le ponía el partido al Azuqueca que, aún así, no dejó de intentarlo en el ataque, aunque sus centros desde las bandas no encontraban rematador.
Juani volvió a meter más pólvora en el ataque con la entrada de Doménech, pero el Villarrobledo supo administrar el 0-2 a su favor, mostrando firmeza y contundencia defensiva, reculando metros y buscando alguna contra para sentenciar un partido que siempre tuvo bajo su control ante un Azuqueca que se quedó bastante tocado tras el 0-2 y al que le pesó mucho la precipitación por querer recortar distancias a la desesperada. La mano de Jimmy en el minuto 75 impidió que el resultado fuera mucho más abultado para el Villarrobledo tras despejar un remate de cabeza de Óscar dentro del área.
Los últimos minutos fueron consumiéndose con el quiero y no puedo de un Azuqueca que apenas inquietó la portería del Villarrobledo.
AZUQUECA, 0; VILLARROBLEDO, 2
AZUQUECA: Jimmy, Fabri, Bruno, Vega, Beltre, Monroy (Buedo 82´), Cachorro (Doménech 60´), Borja (Rober 46´), Lucas, Manu (Runi 79´), Solcán.
VILLARROBLEDO: Chori, Carlos Martínez, Chato, Carrasco (Kevin Sanz 72´), Carmelo (Enzo Varela 86´), Leomar (Kevin 72´), Dani Rivas, Pepe (Fran Minaya 86´), Loren, M. Vives, Iván Garrido (Óscar García 62´)
ÁRBITRO: Mohamed Massat. Amonestó a Buedo, por el Azuqueca, y a Kevin, por el Villarrobledo.
GOLES: 0-1. Min. 45. Carmelo. 0-2. Min. 51. Carmelo.
INCIDENCIAS: Encuentro de la décima jornada en el Grupo XVIII de la Tercera RFEF disputado en el San Miguel de Azuqueca de Henares ante unos 500 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria de todos los fallecidos por las trágicas riadas de la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Andalucía.