El Quabit viaja a Aranda de Duero buscando su segunda victoria

“Todos los partidos son igual de importantes, pero este, tal vez lo sea mucho más”. Así define el entrenador del Quabit Guadalajara, Mariano Ortega, el nuevo reto que se le presenta al equipo.

Los morados afrontan este sábado una nueva cita liguera. Será a las 19.00 horas en Aranda de Duero, ante el Bodegas Ceres, equipo que ha regresado este año a la Asobal y que se encuentra a estas alturas de la competición en una situación muy pareja a la de los morados. El cuadro burgalés aún no conoce la victoria y ocupa el farorillo rojo de la tabla con un solo punto en su casillero.

“La clasificación marca y estamos en una situación complicada los dos equipos en la tabla. El partido es una final, pero como tienen que ser todas; en esta liga, salvo el Barcelona que está un peldaño por encina, a todos los demás se les puede ganar”, recalca Ortega y descubre algunas cualidades de los burgaleses: “Es un rival que está compitiendo muy bien, con mucha movilidad y que genera dudas a los equipos rivales y con un contraataque muy bueno. No es un equipo con mucho lanzamiento exterior y se basa en el juego de uno contra uno o dos contra dos y con su juego de pivote. Será un partido para pelear y trabajar los 60 minutos y esperemos sacar algo positivo. Además vamos a una pista complicada que históricamente se nos ha dado muy mal”.

El Quabit tratará de sumar para salir de una delicada situación. Con solo tres puntos de 16 posibles, los morados están en la zona peligrosa de la tabla. “Estamos dolidos por la situación, pero veo al equipo bastante unido y trabajando muy bien y necesitamos un par de victorias para refrendar ese trabajo que estamos haciendo”, destaca el preparador del Guadalajara.

Alberto Sanz, con un esguince que le impidió jugar ante Bidasoa es la única duda. El resto de jugadores  está disponible para afrontar la cita en Aranda.