La Policía Nacional interviene en Vicálvaro para ordenar las aglomeraciones tras el descarrilamiento del tren

27/10/2025 - 18:41 FCV

Caos, desinformación y nervios en la estación de Cercanías de Vicálvaro durante la tarde de este lunes. La intervención de agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (U.P.R.) de la Policía Nacional ha sido necesaria para poner orden entre cientos de viajeros que esperaban un transporte alternativo tras la interrupción del servicio del Cercanías que conecta Madrid con Guadalajara, horas después de que un tren descarrilara en las inmediaciones de San Fernando de Henares. El accidente obligó a cortar la circulación entre Vicálvaro y Alcalá de Henares, y entre Guadalajara y San Fernando. Desde entonces, la confusión ha sido la norma.

Durante casi dos horas, los viajeros aguardaron bajo un ambiente de desorientación y enfado generalizado. Según relata la testigo Inés Muñoz, la policía tuvo que intervenir para evitar empujones y organizar las colas ante la llegada de los cinco autobuses dispuestos como refuerzo.

“Llevo aquí desde las cuatro”, cuenta Inés, visiblemente cansada mientras habla desde el interior del autobús que la lleva camino de Alcalá. “Hemos estado casi una hora esperando, y luego nos han dicho que iban a poner autobuses directos. Pero sin información… la gente se ha ido colocando como podía. Al final tuvo que venir la UPR a organizar las filas, porque aquello era imposible”.

Inés, que salía de trabajar y esperaba su tren habitual, asegura que la información en la estación fue escasa y confusa.

“Por megafonía solo decían que había un tren descarrilado y que no había servicio desde San Fernando hasta Torrejón. Nada más. Ni siquiera nos dijeron de dónde salían los autobuses; nos pusimos todos en la puerta, por intuición”.

El malestar se palpaba entre los viajeros.

“La gente está muy mosqueada, porque esto pasa día sí, día también”, protesta Inés. “Todos los días es una aventura. Antes el abono era gratuito y me callaba, pero ahora lo pago, y seguimos igual. Es increíble”.

Su testimonio refleja un sentir generalizado. Muchos usuarios coinciden en que los retrasos y las incidencias en la línea C2 se han vuelto una rutina. A la tensión por el descarrilamiento se sumó la falta de información y la descoordinación en tierra.

“Ni siquiera nos decían nada por megafonía, que buscásemos transportes alternativos. Después de una hora, por fin avisaron de los autobuses, pero tampoco sabíamos de dónde salían”, añade.

Mientras tanto, la circulación de trenes sigue interrumpida entre San Fernando y Alcalá de Henares, y Renfe mantiene servicios por carretera para conectar los tramos afectados. La normalidad, de momento, no tiene hora prevista.