López y Moronta buscarán podio en el Mundial de Cancún

15/10/2018 - 10:00 Alberto Moreno Pérez

El Campeonato del Mundo de Judo en su especialidad de katas tendrá representación alcarreña. Desde el pasado día 12 y hasta el 18 de este mes de octubre la localidad mexicana de Cancún acoge esa cita internacional a la que acudirá la Escuela de Judo tradicional Inokuma de Guadalajara, con doble representación.

Por un lado, con el entrenador del equipo nacional Carlos García Pasán y por otro con la pareja que competirá en Kime-No-Kata, formada por Alberto López y David Moronta.

Son dos de los habituales de las convocatorias de la selección española. Y esta vez, acuden con la intención de tocar medalla.

Alberto López explica que “nuestro principal objetivo es superar el quinto puesto que hemos logrado en los dos últimos mundiales”. Para eso, la pareja alcarreña debe superar la fase de clasificación del lunes, día 15. Al día siguiente se disputarán las correspondientes finales y ahí esperan estar los de Inokuma.

“Si logramos superar el primer corte podemos soñar con todo, porque a estos niveles está todo muy igualado y un pequeño detalle te puede dejar fuera de las medallas o también te puede meter en ellas”, dice López y añade que “nosotros haremos nuestra kata habitual, a nuestro estilo”, aunque avisa de que “hemos hecho algunos pequeños cambios que pueden ayudarnos a cruzar esa barrera de los metales”.

La pareja de Inokuma apunta como grandes rivales para el podio a japoneses y franceses. “Entre ellos dos estará el oro”, avanza Alberto López y añade entre los favoritos también a italianos, la pareja de Irán e incluso sus compañeros de selección, los hermanos Vicens.

López y Moronta están acostumbrados a vivir campeonatos del mundos y Europeos, aunque cada cita es especial. “Según vamos cumpliendo años todo es más emotivo porque pensamos que puede ser nuestra última competición y nos gustaría dejarlo con algo importante”, explica Alberto López. De igual modo reconoce que “ir convocado con el equipo nacional ya es un sueño, es una experiencia muy enriquecedora”, aunque el gran premio sería lograr un metal en un año en el que el judo español está de moda, tras el reciente oro mundial de Nikoloz Sherazadishvili.