Pi, pi, pi... desconexión

05/04/2015 - 18:42 Ana G. Hernández

El Marchamalo hizo estación de penitencia durante esta Semana Santa que comenzó el Domingo de Ramos con la primera procesión de estos siete días en Las Pedroñeras. Allí, el equipo local se jugaba mucho más que los gallardos y quedó patente en el verde castigando al penitente con tres dianas. Ya en casa, los verdillos regresaron al padecimiento en la segunda procesión de la semana el Jueves Santo. Mismo castigo, mismo final, diferente recorrido. En esta ocasión era el Quintanar del Rey el que infligía el castigo. Lejos de amilanarse, el Marchamalo debía de realizar su última estación de Semana Santa el Domingo de Resurrección: una fecha marcada para volver a levantar la cabeza. El rival era propicio, un Toledo B prácticamente salvado y sin apuros. Sin embargo, el Marchamalo, como buen penitente cargó sobre su hombro otra derrota y eso que tuvo la posibilidad de empatar en la última jugada del partido, pero se quedó ahí, en una posibilidad.


Y es que, la primera parte fue para el olvido de todos los presentes: apenas ocasiones y con dos equipos en exceso relajados. Quizá el filial dispuso de más posesión y de más ganas ante un Marchamalo que incapacitado. La mejor ocasión para los toledanos, ayer de rosa, llegó en las botas de Héctor Maqueda, pero su disparo desde la frontal lo atajó sin problemas Sebas.


Tras el paso por los vestuarios, Nito Alonso rectificó el andar de los suyos, que parecían moverse con más gracia. Sin embargo, era el Toledo B el primero en avisar en un córner a través de Adri. Poco después y en una de las pocas jugadas que ayer le salieron a Manolo, el ‘10’ consiguió una falta en la frontal del área y cerca estuvo de dar la primera alegría de la semana a su afición. Sin embargo, su chut se topó con el larguero cuando La Solana cantaba el primero.


Cinco minutos después y en otra ocasión a balón parado, Dani se enredaba con De la Plata al remantar en el corazón del área un córner botado por Rafa Espada. Dos minutos después y precisamente en un saque de esquina, Rubén aprovechaba un fallo de marca para hacer el primer tanto a favor de los visitantes. Fue el propio Rubén el que en la siguiente jugada estuvo a punto de sentenciar el partido. Pero su disparo, en un libre directo, se marchó al lateral de la red.


A falta de 15 minutos, el Marchamalo achuchó, pretendía hacer lo que no hizo en 75 y casi lo consigue en el último minuto con Sebas en el área rival incluido. Pero De la Plata se hizo un lío y, en el córner posterior, el centro de Manolo no encontró rematador.