Tokio Kará: Contradicciones

Como me ha pasado en múltiples ocasiones me encuentro entre dos realidades distintas. La primera la que me llega a través de amigos y familiares, me cuentan noticias sobre los Juegos que luego busco por Internet para conocerlas más detalladamente. En esta «realidad» se encuentra la posible cancelación inminente de los Juegos, mezclada con la oposición frontal a la celebración por parte de los habitantes de Tokio, las protestas de los médicos junto a la situación absolutamente incontrolable de la pandemia que lleva incluso a miembros del comité organizador a suicidarse.

La otra «realidad» es la que vivo día a día. Todo sigue su curso como cualquier otra cita olímpica, bueno, mejor que cualquier otra cita olímpica porque el nivel de preparación de la organización japonesa es extraordinario. Semana a semana van llegando compañeros de todos los rincones del mundo y el ambiente difiere poco del de los pasados Juegos de PyongChang y mucho del de los de Río, con mucha ventaja hacia los actuales. He visto varias manifestaciones por las calles, ninguna contra los Juegos. Con esto no quiero decir que nada de lo primero sea falso, parte es cierto, pero por supuesto mucho más amplificado que la normalidad que yo estoy viendo desde aquí.

Y a poco más de un mes para que comiencen los Juegos tenemos pronto el solsticio de verano, son los días más largos que por Japón se viven de una forma completamente distinta a España. Tenemos una diferencia de hora oficial con España de 7 horas pero la diferencia solar es mucho mayor. Mientras por ahí el mediodía solar es a las 14:10 aproximadamente, en Tokio es a las 11:40, por tanto la diferencia solar es de 9 horas y media. Anochece sobre las 7 de la tarde y a las 4 de la madrugada ya es de día. Los horarios comerciales y administrativos, sin embargo, poco varían respecto a nuestros estándares. En Japón no hay cambio de horario de invierno a verano.

Esto me recuerdas a las polémicas españolas cada vez que se habla se la supresión del horario de verano y si el definitivo debe ser el actual de invierno (una hora de diferencia con el solar) o el actual de verano (dos horas de diferencia con el solar) y lo que he visto es que casi nadie lo tiene claro y que la experiencia lleva a paradójicas contradicciones.  Férreos defensores del horario de verano español puesto que según ellos en España que se vive por la tarde-noche, les gusta este horario que tiene más noche para disfrutar, y a la inversa. 

Termino rompiendo tópicos. Tenemos estereotipados a los japoneses como educados, respetuosos, cumplidores de las normas,… Basta caminar un rato por las aceras de Tokio para comprobar que todo eso es falso, al menos para la mayoría de los usuarios de bicicletas que no son pocos y conductores de vehículos en general. En esto en Europa, incluyendo España, vamos muy por delante.