Tokio Kará: Trenes

23/05/2021 - 12:00 José Luis Yañez

Los eventos de prueba en las sedes siguen desarrollándose según lo previsto. Esta semana le ha tocado al parque de deportes urbanos Ariake, donde se disputarán deportes nuevos en los Juegos como el BMX estilo libre o el monopatín. La competición se puede ver durante segundos desde el Yurikamome, el tren elevado que pasa junto a este parque, algo que me viene bien como excusa para hablar de uno de mis temas favoritos y que en Tokio es todo un espectáculo, los Trenes.

Esta línea, el Yuricamome, no es un ferrocarril, son trenes neumáticos similares a los que circulan en la T4 de Barajas y como estos últimos circulan sin conductor. Todo el trayecto es elevado sobre las calles de la antigua zona del puerto de Tokio. Otro tren neumático es el monorraíl, que une el centro con el aeropuerto de Haneda. También va elevado sobre las calles excepto un pequeño tramo subterráneo y a diferencia del anterior las ruedas no van sobre una superficie plana sino sobre una viga de hormigón de menos de un metro de ancho.

El resto de los trenes van por railes, de distintos anchos pero railes convencionales. Y si de algo pueden presumir es de la puntualidad. En Tokio la red de transporte público funciona como un reloj. Hasta las líneas urbanas de autobuses siguen el horario que pone en la parada. En el metro también todos los trenes tienen horarios, no son necesarios para moverse por el centro ya que las frecuencias son de escasos minutos pero sí para subirse a algunos convoyes que salen del centro para convertirse en líneas exteriores. Es como si un 10% de  trenes de la línea 5 de metro de Madrid, por ejemplo, continuaran su trayecto hasta Guadalajara. No todos los trenes de un andén van al mismo destino. En las líneas de que podríamos asemejar a las de cercanías pasa lo mismo, suele haber andenes diferenciados para cada una de las rutas pero no siempre se cumple. Para llegar a un destino puede que existan varias opciones ya no solo de compañía y de precio sino de trayecto. Con aplicaciones como Google Maps o Moovit, no hay ningún problema para realizar cualquier viaje, las indicaciones son precisas mostrando las salidas de las estaciones que se tienen que usar —todas están correctamente numeradas— incluso la posición dentro del tren —los coches están numerados tanto dentro como en el andén— para salir lo más cerca a la salida o al transbordo. Los billetes se pueden comprar en las maquinas de las estaciones indicando el trayecto según el cual será el precio. En caso se terminar en una estación distinta a la prevista hay maquinas a las salidas para ajustar el precio, para evitar esto casi todo el mundo utiliza las tarjetas monedero Pasmo o Suica. El precio es el mismo aunque mucho más cómodo, hay que pasarlas a la entrada y a la salida que es cuando realmente se hace el cargo, y ojo porque aunque se recargan en las mismas máquinas de billetes hay que hacerlo en metálico, nada de tarjetas de crédito.