Cine Alcarria, una experiencia educativa para unir a los jóvenes amantes del cine
Se ha cumplido la segunda edición y la iniciativa se ha consolidado. Es hora de empezar a trabajar en la tercera, pero sobre todo de felicitar a los participantes y colaboradores.
Seis cortometrajes en lugar de cuatro fueron los proyectados en la segunda edición de Cine Alcarria, celebrada con gran éxito de público y apoyo institucional, este martes en los Multicines de Guadalajara. El reto de los organizadores, el periódico Nueva Alcarria y la Universidad de Alcalá, es que Cine Alcarria se convierta en una experiencia educativa en la que se integren estudiantes de distintos cursos y grados, y en los que los alumnos de mayor experiencia sean quienes enseñen de forma directa a los que se vayan incorporando para que cuando lleguen al final de sus ciclos formativos ya sean a su vez maestros de quienes les sucedan. Todo ello supervisado y guiado por productores ejecutivos, pertenecientes al mundo del cine y con experiencia docente. La iniciativa no solo llega a estudiantes universitarios del Grado de Comunicación Audiovisual de la UAH sino que se extiende a institutos de la provincia. Alumnos del Conservatorio colaboran en las bandas sonoras, jóvenes de la Escuela de Arte Elena de la Cruz, de distintas escuelas de interpretación o colectivos de actores como Gentes de Guadalajara también forman parte de este proyecto que busca crear un tejido artístico que una a todos los jóvenes amantes del cine de la provincia.
Se ha cumplido la segunda edición y la iniciativa se ha consolidado. Es hora de empezar a trabajar en la tercera, pero sobre todo de felicitar a los participantes, a los colaboradores, Ayuntamiento de Guadalajara, Diputación Provincial y Gobierno regional, a los Multicines de Guadalajara donde, en su gran pantalla, ven hecho realidad su sueño los jóvenes actores que empiezan su andadura por el mundo del séptimo arte, a Servicios Reunidos Peñas y a la Universidad de Alcalá, compañero de viaje en esta aventura que promociona a nuestra gente, pero también a espacios de la ciudad y de la provincia, como, en esta ocasión, Hita, La Vereda o Campillo de Ranas. Gracias también a Memora que donó un ataúd para un rodaje, al Buen Vivir que dejó rodar en su establecimiento, al jurado profesional que ha impartido clases magistrales durante el año en sus distintas especialidades, a los artistas locales Itziar Gregorio o Chema Abascal, que nos han cedido temas propios para su uso, a José Carlos Esteban, de la Escuela de Folklore, a la escuela de música del Palacio de la Cotilla, dirigida por Javier Villaverde y en particular a Julián de la Fuente (UAH) y nuestro compañero Javier Pastrana, almas del proyecto.