La importancia del estudio topográfico y la digitalización del terreno para cultivar trufas
Un dron aéreo teleridigido se encargará de medir la finca trufera mediante GPS
Para poder describir y representar en un plano la superficie o el relieve de una parcela en la que se quieren cultivar trufas, Servicios Truferos Aparicio (PADIDÚ) tiene en cuenta el valor del estudio topográfico. “Es de vital importancia hacer un estudio minucioso del terreno. De esta forma, conoceremos perfectamente las características orográficas de nuestra parcela, mediante la generación de un modelo 3D del terreno”, expresa Juan Carlos García Aparicio, el CEO de la empresa.
El estudio topográfico del terreno mediante técnicas fotogramétricas con drones, nos permite obtener modelos digitales del terreno de alta resolución y precisión. La introducción de esta tecnología de precisión sirve para estudiar y programar la plantación con exactitud, proyectar la nivelación de la finca para evitar puntos de acumulación de agua o con escorrentía excesiva y para que, a posteriori, se facilite la labor de los diversos vehículos autónomos que ofrece esta empresa, como es el caso de la nariz electrónica que localiza las trufas por olores; o bien, el robot capaz de realizar nidos alrededor del árbol.
La obtención de un modelo digital del terreno de alta resolución y precisión en coordenadas georreferenciadas en el sistema oficial en España, aparte de los datos del terreno, permite obtener la localización exacta de los árboles existentes, con márgenes de error de dos centímetros, su altura y su diámetro de copa.
Una vez realizada la digitalización y georreferenciación del terreno y los árboles (si ya están plantados), esto nos permitirá la monitorización de cualquier equipo autónomo posicionado con GPS. Toda información monitoreada por los equipos autónomos podrá ser posicionada en tiempo real sobre el terreno digitalizado previamente.
Actualmente, una de las tecnologías que nos permite realizar estos trabajos de digitalización del terreno son los drones, pequeñas aeronaves no tripuladas que, en estte caso realizan fotos. Mediante el procesado de las imágenes captadas por los drones obtenemos los modelos digitales de precisión.
Esta tecnología podrá llegar a captar irregularidades en el terreno, desniveles, la magnitud y hasta los mejores rincones para plantar los árboles por GPS (por descubrir en el siguiente reportaje).
No todos los suelos valen
Factores como la lluvia, la temperatura, la altitud, la humedad o el ph son algunos de los aspectos a tener en cuenta para la cría de este oro negro. La mejor zona es aquella en la que el ph de la tierra se halle en 7,5, es decir, que sea una superficie neutra con porcentajes equilibrados; la altitud se encuentre por encima de 700 metros; y que haya cambios climáticos muy fuertes (veranos calurosos e inviernos gélidos). “Indudablemente, no todos los terrenos valen”, explica Juan Carlos García Aparicio. Es más,“la clave está en que los suelos tengan buen drenaje y no sean arcillosos”, añade. Por ejemplo, el campo donde se haya plantado cereal es idóneo para la cría de trufa.
Árbol inoculado
Una vez expuestas las características apropiadas para el cultivo de trufa, hay que prestar especial atención al tipo de árbol que se va a plantar. Este siempre ha de estar inoculado, o sea, se le tiene que haber introducido a sus raíces un gel compuesto por esporas y propágulos miceliares del hongo en cuestión, lo que provoca la formación de micorrizas y, en consecuencia, el nacimiento de la trufa. El roble y la encina son las especies más utilizadas. Sin embargo, existen otros tipos de árboles que son menos habituales como los avellanos.
Continúa atento a esta saga de reportajes disponibles cada viernes en nuestras páginas donde se ampliará información detallada y de interés sobre este sector. No te pierdas la próxima entrega sobre la plantación de árboles por GPS.