Actuaciones de la red de servicios sociales
01/10/2010 - 09:45
Por:
Cartas al director
HUGO MUÑOZ CLAVER / Director General de la Familia
Ante las opiniones vertidas en la sección Carta al Director de este diario el día 25 de junio de 2010 por Aurelio Sánchez Santos, poniendo en tela de juicio el trabajo de los diferentes servicios de Protección de Menores de Castilla- La Mancha, como director general de la Familia no me queda más que lamentar el profundo desconocimiento que muestra este ciudadano de las actuaciones que se llevan a cabo desde la red de servicios sociales especializados en protección infantil en esta Comunidad y su evidente falta de respeto a la labor que llevan a cabo los profesionales de estos servicios.
En primer lugar, quisiera decir que el único interés que nos mueve a la hora de asumir la tutela o guarda de un niño o niña es su interés superior, según la Convención de los Derechos del Niño y que la primera intención del Equipo Interdisciplinar de Menores que se hace cargo del caso es que ese niño esté, donde mejor puede estar, que es en manos de sus padres biológicos.
Los equipos de protección y los servicios sociales básicos de la red de servicios sociales de Castilla-La Mancha, trabajan con la familia biológica para evitar la separación de los niños de sus padres y si esto no es posible conseguir que la separación sea lo más breve posible.
Desafortunadamente, muchas veces no es posible, por lo que el equipo, después de valorar las distintas opciones, elige la mejor para el menor, entre estas opciones está la adopción cuando se concluye que el hijo no puede retornar con sus padres por no haber sido posible superar la situación que dio lugar al desamparo de ese menor.
Ese niño o niña que puede estar esperando en este tiempo en una acogimiento residencial o en una familia de acogida, (que ha de entender que la estancia con ellos de ese niño es temporal) pasa a ser adoptable con el único fin de darle una opción de vida estable.
Como ve, el trabajo realizado por todos los profesionales de los servicios sociales y especialmente el de los profesionales de los servicios de menores de las distintas Delegaciones y de esta Dirección General es un trabajo duro, difícil por tratarse de familias con muchos problemas, las decisiones se toman analizando situaciones muy complejas y con el tiempo en contra ya que son niños de corta edad que no pueden esperar varios años para que alguien defina su vida, aunque estas decisiones puedan no ser lo suficientemente comprendidas ni compartidas por quien no conoce en su totalidad la situación familiar.
Por ello, lo que es escandaloso, repugnante y contrario a la idea de justicia es comparar a estos profesionales con el nazismo, el estalinismo o el franquismo porque gracias a ellos tenemos a más de 1.200 menores protegidos dentro de nuestra comunidad autónoma en los distintos recursos y programas llevados a cabo por la Dirección General de la Familia en colaboración con las distintas entidades que trabajan en centros de primera acogida y valoración, hogares residenciales, familias de acogida, familias de urgencia y especializadas, pisos de autonomía personal, recursos terapéuticos y programas de apoyo a la familia, etc.
Yo, personalmente, solo puedo como Director General, darles mi más sincero agradecimiento, apoyo y aliento, para que sigan trabajando a favor de los niños y niñas y sus familias en nuestra Comunidad como lo hacen hasta ahora.
Los equipos de protección y los servicios sociales básicos de la red de servicios sociales de Castilla-La Mancha, trabajan con la familia biológica para evitar la separación de los niños de sus padres y si esto no es posible conseguir que la separación sea lo más breve posible.
Desafortunadamente, muchas veces no es posible, por lo que el equipo, después de valorar las distintas opciones, elige la mejor para el menor, entre estas opciones está la adopción cuando se concluye que el hijo no puede retornar con sus padres por no haber sido posible superar la situación que dio lugar al desamparo de ese menor.
Ese niño o niña que puede estar esperando en este tiempo en una acogimiento residencial o en una familia de acogida, (que ha de entender que la estancia con ellos de ese niño es temporal) pasa a ser adoptable con el único fin de darle una opción de vida estable.
Como ve, el trabajo realizado por todos los profesionales de los servicios sociales y especialmente el de los profesionales de los servicios de menores de las distintas Delegaciones y de esta Dirección General es un trabajo duro, difícil por tratarse de familias con muchos problemas, las decisiones se toman analizando situaciones muy complejas y con el tiempo en contra ya que son niños de corta edad que no pueden esperar varios años para que alguien defina su vida, aunque estas decisiones puedan no ser lo suficientemente comprendidas ni compartidas por quien no conoce en su totalidad la situación familiar.
Por ello, lo que es escandaloso, repugnante y contrario a la idea de justicia es comparar a estos profesionales con el nazismo, el estalinismo o el franquismo porque gracias a ellos tenemos a más de 1.200 menores protegidos dentro de nuestra comunidad autónoma en los distintos recursos y programas llevados a cabo por la Dirección General de la Familia en colaboración con las distintas entidades que trabajan en centros de primera acogida y valoración, hogares residenciales, familias de acogida, familias de urgencia y especializadas, pisos de autonomía personal, recursos terapéuticos y programas de apoyo a la familia, etc.
Yo, personalmente, solo puedo como Director General, darles mi más sincero agradecimiento, apoyo y aliento, para que sigan trabajando a favor de los niños y niñas y sus familias en nuestra Comunidad como lo hacen hasta ahora.