Alovera, muy a su pesar

Después de superados dos casos de malos tratos, uno de ellos con fallecidos, ayer fue el escenario de un apuñalamiento doble provocado por una reyerta entre vecinos que, a la vista del resultado, no supieron resolver sus diferencias hablando, como tanto se predica desde las administraciones. Pero lejos de toda esta imagen que quizás se esté dando del pueblo, éste es un municipio joven, agradable para vivir, con vecinos de los de toda la vida que tienden la mano a los que recién se trasladan a la localidad. Y es que, enclavado en pleno corazón del Corredor del Henares, Alovera ofrece una de los mejores escenarios para iniciar una nueva vida, al abrigo de sus buenas comunicaciones y de sus servicios. Sin embargo, casos como el registrado esta semana ha vuelto ha sacar a la luz lo peor del ser humano, aquel que se deja llevar por su ira ante pequeñeces de la vida que nunca deberían desencadenar en un ataque a nadie, y menos a un vecino, con el que deberíamos compartir charlas sobre el tiempo y tacitas de azúcar. Afortunadamente, éste es sólo un hecho aislado.