¿Año de bienes?

15/02/2014 - 23:00 Pedro Villaverde Martínez

Cuando éramos pequeños nos hacía ilusión el día que nevaba. Luego venía el frío y teníamos que calentarnos las manos con el cálido soplido, pues ni guantes teníamos para protegernos. El refranero siempre salía al encuentro y nos decía aquello de “año de nieves, año de bienes” y para los más pequeños solía suponer alegría cada vez que veíamos que los blancos copos iban cubriendo la tierra y dejando un manto blanco sobre la misma. En nuestro pueblecito allá en el Alto Tajo y con agrestes contornos rocosos suponía todo un espectáculo contemplar el paisaje nevado. El frío, aunque dejaba ateridas las manos, apenas era sentido porque la ilusión de jugar con la nieve era mayor… Recuerdos de infancia que vienen cuando vemos caer los copos e ignorábamos entonces los contratiempos que aquella bella estampa suponía en el diario vivir. Ignoramos el origen de los refranes, siempre oportunos, y hoy nos acordamos de aquel que decía “año de nieves, año de bienes”…y cómo en los tiempos que corren, y siempre,los bienes son anhelados, hoy queremos en nuestra columna rememorar aquellas alegrías y desear que sea cierto lo de “año de bienes”… Bienes tan deseados y queridos siempre y más cuando la necesidad obliga. Febrerillo, el corto, suele presentar el alivio de que nos obsequia con su cortedad la llegada anticipada de la deseada primavera. Vivimos, sin duda engañados por estas pequeñas cosas, pero entretenidos con ellas tal vez se cumplan los deseos de añorados tiempos mejores. Siempre es bueno, aunque no fácil, pensar en lo mejor en la creencia de que así llegará antes. De la crisis mejor no acordarnos aunque haya que padecerla… Cierto que no sólo de pan vive el hombre…pero no menos cierto que necesitamos del pan para vivir. Y cierto parece que “comerás el pan con el sudor de tu frente” pero no con el sudor del de enfrente… Como vemos estos días de menos que febrero tiene y encima con la nieve que nos trae nos sirve de pretexto y esperemos que para algo más, de escribir estas líneas con interrogación de si será el año de los deseados y necesitados bienes.
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