Carta de despedida a mi tía Candelas
01/10/2010 - 09:45
Cristina Parés Clemente - Barcelona
Querida tía candelas, siempre que he ido al pueblo de vacaciones estabas ahí para darme un beso y un abrazo.
Ahora estoy aquí con toda la familia, vecinos y amigos y no me ha dado tiempo de despedirme de ti. Has sido toda una institución en Torremocha del Pinar. No creo que haya nadie por estos alrededores que no te conociera. A quien me preguntaba que de dónde era y en qué pueblo estaba, siempre respondía ¡En Torremocha del Pinar, soy sobrina-nieta de Candelas La Checana!
Te vamos a echar de menos, tanto como a los demás tíos que se nos han ido. Torremocha para mí ya no es lo mismo son vosotros. Espero que cuando les veas les des un fuerte abrazo y a mis abuelos, Pablo y Meli, les dices que no hay día que no me acuerde de ellos. Cuando yo llegaba corriendo a tu casa siempre me decías: Ya está aquí mi sol. Ahora te digo yo, con todo mi cariño:¡ Adiós tía Candelas, adiós a mi sol! Te mando un fuerte abrazo y ¡Hasta siempre!
Te vamos a echar de menos, tanto como a los demás tíos que se nos han ido. Torremocha para mí ya no es lo mismo son vosotros. Espero que cuando les veas les des un fuerte abrazo y a mis abuelos, Pablo y Meli, les dices que no hay día que no me acuerde de ellos. Cuando yo llegaba corriendo a tu casa siempre me decías: Ya está aquí mi sol. Ahora te digo yo, con todo mi cariño:¡ Adiós tía Candelas, adiós a mi sol! Te mando un fuerte abrazo y ¡Hasta siempre!