Castilla y León
01/10/2010 - 09:45
EL COMENTARIO
Teodoro Alonso Concha - Profesor de Filosofía
Nuestra provincia de Guadalajara, parte integrante de la histórica Castilla, una vez que fue incluida en la comunidad de Castilla- La Mancha, va progresivamente diluyendo sus caracteres propios y asimilándose a su denominación manchega.
El guión que une el nombre de Castilla-La Mancha delata una incoherencia porque une dos realidades heterogéneas como es la histórica de Castilla con la geográfica de La Mancha. No se podía poner Castilla y la Mancha porque la primera incluye a la segunda. Podría haberse mantenido la tradicional de Castilla la Nueva pero se prefirió que apareciese La Mancha, con clara tendencia a ser lo diferenciador, cuando es simplemente una de sus comarcas.
Al margen de las intenciones de los que decidieron este nombre, una vez confirmado, favorece el deslizamiento hacia lo manchego como lo unificador de la comunidad, además de diferenciador frente a otras comunidades. El callado pero claro proceso de manchegización de nuestra provincia se ejemplifica en diversas actuaciones de la administración regional. Como muestra, dos botones: el logotipo turístico para toda la región, don Quijote y Sancho cabalgando por regiones que les resultarán desconocidas, o el proyecto de convertir el palacio renacentista de Cogolludo en espacio para ambientar las escenas del palacio de los duques que aparece en el Quijote y que Cervantes describe próximo a Zaragoza. Basta hacer un viaje por la comunidad de Castilla y Leon, para percatarse de que ese territorio nos es muy próximo, que con él compartimos la historia, el paisaje, el legado artístico y popular, que es el nuestro. Un territorio que, en un reciente viaje, me ha dejado una grata impresión y me ha sorprendido comprobar que se cuida el patrimonio, la limpieza de los pueblos, el buen gusto, la memoria de sus personajes. No he visto pintadas, ni grafitis o suciedad en ninguno de ellos. Es cierto que he visitado los pueblos del románico palentino por donde además pasa el camino de Santiago.
Sí he encontrado referencias a personajes de Guadalajara: En Carríon una placa en la casa donde nació el marqués de Santillana y un monumento moderno con la leyenda: A los hijos que nos dieron nombre y fama. En la iglesia de Aguilar de Campo la esposa que acompaña a uno de los personajes esculpidos en actitud orante, era hija del Duque del Infantado.
No podemos vivir de espaldas a la Comunidad hermana, hace falta más relaciones institucionales, proyectos comunes como puede ser el Camino del Cid, y poner el acento en lo castellano de nuestra comunidad al lado de lo manchego. Después de las tergiversaciones de la idea de Castilla, identificándola con el centralismo, ahora lo castellano, con el idioma como primer tesoro universal, debe ser representado por ambas comunidades..
Al margen de las intenciones de los que decidieron este nombre, una vez confirmado, favorece el deslizamiento hacia lo manchego como lo unificador de la comunidad, además de diferenciador frente a otras comunidades. El callado pero claro proceso de manchegización de nuestra provincia se ejemplifica en diversas actuaciones de la administración regional. Como muestra, dos botones: el logotipo turístico para toda la región, don Quijote y Sancho cabalgando por regiones que les resultarán desconocidas, o el proyecto de convertir el palacio renacentista de Cogolludo en espacio para ambientar las escenas del palacio de los duques que aparece en el Quijote y que Cervantes describe próximo a Zaragoza. Basta hacer un viaje por la comunidad de Castilla y Leon, para percatarse de que ese territorio nos es muy próximo, que con él compartimos la historia, el paisaje, el legado artístico y popular, que es el nuestro. Un territorio que, en un reciente viaje, me ha dejado una grata impresión y me ha sorprendido comprobar que se cuida el patrimonio, la limpieza de los pueblos, el buen gusto, la memoria de sus personajes. No he visto pintadas, ni grafitis o suciedad en ninguno de ellos. Es cierto que he visitado los pueblos del románico palentino por donde además pasa el camino de Santiago.
Sí he encontrado referencias a personajes de Guadalajara: En Carríon una placa en la casa donde nació el marqués de Santillana y un monumento moderno con la leyenda: A los hijos que nos dieron nombre y fama. En la iglesia de Aguilar de Campo la esposa que acompaña a uno de los personajes esculpidos en actitud orante, era hija del Duque del Infantado.
No podemos vivir de espaldas a la Comunidad hermana, hace falta más relaciones institucionales, proyectos comunes como puede ser el Camino del Cid, y poner el acento en lo castellano de nuestra comunidad al lado de lo manchego. Después de las tergiversaciones de la idea de Castilla, identificándola con el centralismo, ahora lo castellano, con el idioma como primer tesoro universal, debe ser representado por ambas comunidades..