Cela y Buero

Si de bien nacidos es ser agradecidos, la provincia de Guadalajara demostrará atesorar tal virtud con las conmemoraciones que a lo largo de este nuevo año hará en memoria y reconocimiento de dos grandes escritores, el mejor dramaturgo español del siglo XX, el guadalajareño, Antonio Buero Vallejo, y el gallego, que durante unos años residió en nuestra capital y que hizo famosa la Alcarria en el mundo, don Camilo José Cela. Ambos nacieron en 1916 y las efemérides de sus centenarios son propicia ocasión para recordar su figura y legado, compuesto éste por un buen número de libros y obras teatrales. La Feria Internacional del Turismo será, por impulso de la Diputación y la renacida Asociación Viaje a la Alcarria, punto de partida del homenaje al Nobel que conoció tal distinción en su casa de la urbanización de El Clavín. Allí recibió en aquellos días a los por entonces director y subdirector de este periódico, Pedro Villaverde y Luis Monje que le realizarían una entrevista. Cela también escribiría unas líneas de felicitación en el periódico del cincuenta aniversario de Nueva Alcarria y honraría a esta cabecera aceptando el Popular de Honor correspondiente al año de la concesión del Premio Nobel, formando parte de la mesa presidencial. Su presencia en los premios Provincia de Guadalajara, en festejos taurinos y en los homenajes que le tributaban por la capital y la provincia fue una constante en aquellos tiempos - años noventa- que serán rememorados en este 2016, entre otros, suponemos, por su biógrafo Francisco García Marquina o su buen amigo Jesús Campoamor.

En cuanto a don Antonio, extraordinario padrino y maestro del grupo de teatro aficionado de Antorcha, también nos alegra recordar el buen trato que ofreció a Nueva Alcarria siendo un asiduo de las primeras ediciones de los premios Populares, donde fue distinguido y también conferenciante. Un instituto y un teatro a su nombre honran a su persona en la ciudad en que nació, estudió y forjó distintas amistades. Dos grandes literatos, de extensa biografía y múltiples anécdotas, que forman parte de nuestra historia contemporánea y que tuvimos la suerte de conocer al igual que al guitarrista Segundo Pastor, que también hubiese cumplido ahora sus cien años, y que amigo de este periódico, esperemos tenga su momento de gloria.