Cine de calidad

El cine está de enhorabuena. En primer lugar, porque siguen apareciendo obras de altura que destacan entre la tupida, y a veces estúpida, maraña cinematográfica. Y en segundo lugar, porque, estos días concretamente, tenemos en las pantallas dos obras dignas de mención, tanto por su notable calidad formal como por su interesante y, sin duda, valiente temática. Me estoy refiriendo a las películas “Encontrarás dragones” y “De dioses y hombres”. ¿Qué motivaciones pueden tener creyentes y no creyentes para perdonar las heridas de una guerra? Esto es lo que plantea, en el contexto de la guerra civil española, el director Roland Joffé, agnóstico de izquierdas como él mismo se declara, que ya nos conmovió anteriormente con su excelente “La Misión”. ¿La religión ayudar a perdonar, o es más bien una fuente de conflictos? Esto es lo que plantea la película francesa candidata a los Oscar de este año, premio especial del jurado en Cannes. Considero que estas dos películas crecerán en prestigio con el trascurso del tiempo. De hecho, sólo las obras con fondo, con buena raíz, perduran. Tenemos la oportunidad, el público actual, de reconocerlas cuando surgen, y no perdernos entre tanta maleza, o malicia, cinematográfica.