Ciudad del cuento

12/06/2021 - 11:49 Pedro Villaverde Embid

Han pasado casi treinta años desde que en 1992 la alcaldesa y bibliotecaria Blanca Calvo pusiera en marcha esta iniciativa, seguramente sin soñar con la dimensión internacional que adquiriría.

La magia de la palabra llegará a distintos rincones de la capital para anunciar la proximidad del verano, tiempo de luz y alegría. Han pasado casi treinta años desde que en 1992 la alcaldesa y bibliotecaria Blanca Calvo pusiera en marcha esta iniciativa, seguramente sin soñar con la dimensión internacional que adquiriría ni intuir que se convertiría en seña de identidad de Guadalajara en el mundo, por embrujar a los vecinos y por el trabajo durante todo el año del Seminario de Literatura Infantil y Juvenil presidido por Concha Carlavilla. 

      Sufrimos con resignación el aplazamiento en junio y seguimos por streaming, solo unos cuantos afortunados en el propio patio de los Leones, una versión reducida del mismo en septiembre. Esta tarde, con el primer cuento a cargo del alcalde, como manda la tradición, se iniciará la XXX edición, con 46 horas ininterrumpidas de historias, en lo que es una casi recuperación de la normalidad. Hay acomodadores para guiar al público y evitar aglomeraciones,  mascarillas... pero tenemos maratón pese a las tormentas del viernes, esa cita de la que todos guardamos algún  recuerdo porque hemos crecido disfrutando de su singularidad, la que atrae a gente de numerosos lugares y profesionales de la narración de todo el mundo.  

  Aunque el Palacio del Infantado, joya de la capital provincial, sea el epicentro, el Liceo Caracense, el teatro Buero Vallejo, el jardín del Palacio de Dávalos, el claustro del Palacio de los Mendoza-  antiguo Brianda-, la iglesia de los Remedios, el patio de la Diputación Provincial, el CMI Eduardo Guitián y la calle serán escenarios complementarios con Monocuentos, el Festival de Narración Oral o conferencias. Guadalajara entera se contagia de la fantasía y disfruta de dos días, con sus seductoras noches, de ensueño. Pronto la casa de nuestro amigo Carlos Santiesteban será la de los cuentos. No sabríamos decir lo que pensaría de ello pues no fue su intención esa al firmar un convenio con el Ayuntamiento, pero esperamos que una escultura suya, y su obra recuerden la figura de un artista único y el inmueble salga del abandono actual.