Condenados a entenderse

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Editorial
La salud de los ciudadanos de Guadalajara. Ese es el motivo que esta vez obliga a entenderse a la Junta y al Ayuntamiento de la capital. El Ayuntamiento está dispuesto a ceder los terrenos del auditorio de la calle Ferial para que el Gobierno regional construya allí el nuevo ambulatorio Gu-Sur.
El plan parece que satisface a ambas partes, puesto que el Ayuntamiento está deseando demoler el objeto de los desvelos de los vecinos de la zona, a quienes prometió en campaña liberarles de las molestias de los festejos y con quienes comenzó a cumplir con el traslado de la noria y de las tómbolas al otro lado de la A-2. A la Junta, por su parte, la idea no le cae mal, puesto que la mismísima memoria arquitectónica de García de Mercadal, autor del diseño de la antigua Residencia Sanitaria de la Seguridad Social, le ha impedido demoler los edificios actuales para construir el centro de salud que ha proyectado para esta zona. Ahora sólo falta recortar los flecos que cuelgan de la negociación. Román quiere, al parecer, que la Junta le construya en los edificios de la vieja residencia un centro para mayores, algo que no entra en los planes del Gobierno regional y que, ya desde el principio negociador, dificulta el entendimiento. Pero es que algo les tiene que vender el alcalde a los vecinos del entorno, a quienes aseguró hace ya algunos meses que construiría en los terrenos del auditorio un centro social. De momento, lo único que ha encontrado sitio para la mudanza es la nueva Escuela de Enfermería, que se debatió durante algún tiempo entre el nuevo Campus Universitario y el nuevo Hospital y finalmente se decantó por este último -más bien se decantó el Sescam por ella-. Pero aún quedan unos cuantos años para el corte de cinta hospitalario y, al paso que va el procedimiento previo, otros tantos quedan para inaugurar el nuevo centro de salud Gu-Sur. Esperemos que Junta y Ayuntamiento, en esto, sean capaces de entenderse.