Conoce la cocina del Complejo Enoturístico La Estacada: creativa pero basada en los fundamentos clásicos
Esta finca de Tarancón cuenta con un excelente restaurante, un hotel con 4 estrellas y un spa de vinoterapia
El Complejo Enoturístico La Estacada persigue un objetivo: alegrar tanto a la vista como al paladar. Este opera desde 2001 y se sitúa en Tarancón, concretamente en el kilómetro 103 de la carretera N-400. El complejo cuenta con un restaurante, un hotel con 4 estrellas y un spa de vinoterapia en el que disfrutar del vino con todos los sentidos. Pero su gran protagonista es el restaurante. A cargo del chef Roberto Hidalgo, la cocina de La Estacada es creativa y tiene fundamentos clásicos: está basada en la exigente selección de las materias primas elaboradas con el máximo esmero y presentadas con originalidad. En definitiva, una gran referencia de gastronomía castellano-manchega y de cocina de mercado que, además, cuenta con el apoyo de 'Raíz Culinaria', la marca gastronómica impulsada por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha que garantiza la máxima calidad del restaurante.
El restaurante de La Estacada, es un espacio amplio y luminoso gracias a sus bóvedas y a sus grandes ventanales desde los que se puede disfrutar de la extensa plantación de viñedos que rodean la bodega. De hecho, la sala del restaurante cuenta con 180 metros cuadrados con capacidad para 60 comensales, y dos salones privados para 50 personas cada uno. Además, permite acceder directamente a la sala de barricas donde reposan los vinos elaborados en La Estacada.
El restaurante ofrece una amplia carta que posee entrantes fríos, calientes y ensaladas, arroces, carnes y pescados y un exquisito repertorio de postres. Para empezar, el comensal puede encontrar un surtido de ibéricos de calidad. También ensalada de burrata fresca con pesto de pistachos y mix de tomates; tartar de atún rojo y tuétano asado al carbón; pulpo al olivo o alcachofas confitadas con foie y crema de champiñones rustidos con Palo Cortado. Por otra parte, los amantes del arroz pueden degustar el arroz caldoso de bogavante y langostinos de La Estacada o el arroz meloso de boletus y abanico de bellota. Como principales, está el famoso bacalao “tiznao” o atún rojo con salsa de piñones y azafrán, cherrys encurtidos y emulsión de wasabi. En las carnes, La Estacada ofrece chuleta de vaca Txogitxu o solomillo de bellota 100% ibérico a la parrilla de bellota 100% ibérica con pimientos del piquillo caramelizados, entre otros. Esta extensa carta termina con un final dulce, que cuenta con un bombón de coco y chocolate blanco con piña, mango y pistacho; fruta del tiempo o tarta de queso payoyo con helado de fresa.
La finca La Estacada también posee enobar, un nuevo espacio de gastrotapas, acogedor y cálido, en el que destaca la decoración vintage mezclada con elementos ornamentales basados en el mundo del vino. Ideal para que los clientes disfruten de un momento de tranquilidad degustando una amplia oferta gastronómica maridada con los mejores vinos de la bodega. En el Enobar de La Estacada priman las tapas. Entre ellas se pueden encontrar delicias como gambas al ajillo con huevos fritos, patatas bravas, degustación de croquetas o carrillada de cerdo estofado con aguacate asado, boniato frito y brotes de cilantro. Y, para terminar, surtido de helados o fundente de chocolate con helado de vainilla y crema de baileys.
En esta gran finca no podía faltar una terraza que, en época estival, es la gran favorita del complejo. Está ubicada en el porche principal, ofrece la posibilidad de degustar tanto la propuesta gastronómica de La Estacada, como de un desayuno continental al aire libre, con el que los huéspedes pueden deleitarse con la tranquilidad que ofrece el entorno, la gastronomía de la zona y, por supuesto, los vinos de la bodega. En otras palabras, toda una experiencia sensorial. Además, la terraza de La Estacada ofrece la misma carta que el enobar, compuesta por tapas de gran calidad y postres exquisitos para terminar con un sabor de boca dulce este festín.
Por último, La Estacada también tiene una espléndida carta de vinos, entre la que se pueden descubrir vinos blancos, rosados, tintos y espumosos. También y como no podía ser de otra manera, el comensal tiene la oportunidad de probar los vinos hechos en la finca La Estacada.