Crisis e inversión social

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Editorial
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, garantizaba ayer, durante la inauguración del nuevo Centro de Atención a la Infancia de Fontanar, las prestaciones sociales, como principio básico de su gestión, con independencia de la coyuntura económica que concurra. Una palabras que venían a reforzar un mensaje que durante los dos últimos meses se viene lanzando desde el equipo de Gobierno regional como contrapunto a la situación de crisis que se vive en el país.
Como ya indicó el presidente regional, en el Debate del Estado de la Región, para aliviar la economía familiar, se tomarán medidas de rentas, fiscales y de precios y competencia; para atender las necesidades de liquidez de las empresas, medidas de apoyo financiero y técnico a las Pymes; medidas para facilitar el acceso a la vivienda, especialmente a los jóvenes; medidas de apoyo a las industrias auxiliares de la construcción, para mantener la actividad empresarial y los puestos de trabajo. Pero además se adoptarán, para asegurar la salud y el bienestar de los ciudadanos, medidas socio-sanitarias que vienen a reforzar la voluntad de que la crisis no va a frenar el esfuerzo por mejorar la calidad de vida en la región. “Gracias al esfuerzo de todos hemos dado un salto cualitativo hacia delante, porque hemos aprovechado la trilogía: democracia, autonomía política y Europa”, dijo el presidente Barreda, en su visita en la que además aseguró que el ejecutivo castellano-manchego tiene un proyecto socialdemócrata que garantiza protección social de alta calidad en sanidad, educación y servicios sociales. Un ejemplo de ello es que en Castilla-La Mancha el gasto sanitario por habitante es superior al de la media nacional y al de otras comunidades autónomas como Madrid, Cataluña o Valencia o que este año el presupuesto para atender a personas mayores ha aumentado un 33,2% en relación a 2007. Sin duda el compromiso es claro y rotundo.