Cristina Hernando: “Tengo la rodilla destrozada, será muy complicado volver a jugar al fútbol”
La actual jugadora del Deportivo Guadalajara, con pasado en el Atlético de Madrid, repasa su trayectoria y lo mal que le han tratado las lesiones como futbolista.
Las lesiones han sido crueles con ella a lo largo de su trayectoria como futbolista. Cristina Hernando fichó este verano por el Club Deportivo Guadalajara para dejar atrás sus problemas físicos, pero una nueva recaída lo ha complicado todo de nuevo.
Cristina se crió en la cantera del Dépor y, tras ocho años vistiendo los colores del Atlético de Madrid y uno los del Torrejón, regresaba esta temporada a su casa. Más allá de su desafortunada lesión de rodilla, estaba muy contenta con cómo estaban yendo las cosas en este arranque de campaña: “No sabíamos bien cómo iban a ir las cosas, pero no nos podemos quejar porque nos dan de todo. Somos todas una familia, tanto entre nosotras como con el masculino”.
En un equipo totalmente nuevo, Cristina considera que “el techo está donde tú te lo quieras poner”. El balance de su equipo hasta la fecha es muy positivo, ya que cuenta todos sus partidos por victorias a excepción de una derrota. Sin embargo, para ella el objetivo es, más allá de centrarse en el rival más cercano y un hipotético ascenso, estar contenta con su trabajo: “Si no logramos el ascenso, queremos que la afición y la directiva estén contentas por tener un equipo femenino”, afirma ilusionada.
Hernando llegó al club lesionada, recuperándose de una de las múltiples graves lesiones de rodilla que ha tenido. Pese a tener tan solo 21 años, ya acumula cinco operaciones de rodilla y está pendiente de ser intervenida por sexta vez. Los primeros partidos de esta temporada no los pudo disputar por no estar todavía al cien por cien físicamente: “Empecé la temporada recuperándome con el equipo masculino y empecé los partidos en el banquillo porque no podía jugar, estaba ahí por si las cosas iban mal poder ayudar, pero siempre con cuidado”, confiesa.
Orgullosa de ser morada
Para Cristina, volver al Deportivo Guadalajara es un orgullo: “La sensación de poder volver a donde has crecido y donde te has formado como jugadora es increíble. Son los colores que me han hecho sentir lo que siento por el fútbol. Es una sensación difícil de explicar, es sentir que vuelves a casa”, reconoce ilusionada.
Con doce años, se marchó a jugar al Atlético de Madrid, dando un paso que ella no se esperaba dar: “Era un cambio muy grande que yo no quería dar, quería seguir en el Dépor. Al principio me sentía muy desubicada porque los ambientes son muy distintos, ahí supone vivir mucho más por el fútbol, como ser más profesional”. Sin embargo, admite que como colchonera ha vivido “experiencias inolvidables”: “Allí me han tratado muy bien, me lesioné y me recuperé allí... Es un club con nombre, es un club que es reconocido mundialmente”.
Cristina ya vivió un ascenso en el Atlético de Madrid, a Primera B, pero considera que “poder vivir el primer ascenso del nuevo equipo femenino del Dépor y formar parte de ello sería una de las mejores experiencias de mi vida”. Ahora, aunque tiene complicado volver a jugar al fútbol debido a su última lesión de rodilla, -la más complicada que ha tenido según ella-, afirma que volvió a Guadalajara para reencontrarse con el fútbol y dejar atrás toda la presión.
Arrinconada por las lesiones
Si por algo ha estado marcada la carrera futbolística de Cristina Hernando es por la dureza de las lesiones que ha sufrido. Ha sido una recaída constante, que se ha ido repitiendo cada año desde que sufrió la primera de todas: “Me lesioné por primera vez en enero del 2018, luego en 2019, después en 2020 y ahora en 2021. La primera vez que me lesioné yo estaba disputando un amistoso en Los Ángeles de San Rafael. Cuando me pasó, pensé que se me había caído el mundo encima y que hasta ahí había llegado mi oportunidad”, afirma.
Un problema físico de este tipo, según reconoce, te cambia por completo tu carácter dentro del campo y la forma de ver los partidos: “Siempre he sido una futbolista con una forma muy agresiva de jugar. Nunca doy un balón por perdido, si pienso que voy a llegar al balón siempre voy a pelear por él. Cuando me lesioné la primera vez, al recuperarme yo no tenía ese carácter que me definía. Veía que iba con miedo, que me costaba arrancar, no me sentía yo y me costó mucho recuperar ese carácter”. Su primera recuperación fue para ella “un quiero y no puedo”, ya que le lastró mucho física y técnicamente al estar tanto tiempo inactiva.
Ahora, está muy agradecida al Guadalajara por el trato que ha recibido desde que está en el club, pero considera que va a ser difícil que pueda volver a jugar: “Tengo la rodilla destrozada, es muy complicado que pueda volver. Pero tengo claro que aunque mi carrera se acabe aquí, voy a seguir apoyando a mis compañeras como pueda”.
“El fútbol femenino no debería ser menos”
¿Dígamos el nombre de un referente en el mundo del deporte femenino?
Kenti Robles. Cuando llegué al primer equipo del Atlético de Madrid, siempre estuvo a mi lado y me daba muchos consejos. Siempre que me he lesionado ha estado conmigo, aunque solo fuese con un mensaje.
¿Cree que existe desigualdad de género en el deporte?
En el fútbol, las chicas tienen unas cualidades muy diferentes a las de los chicos, pero no creo que ese sea motivo para darle tanta importancia al masculino y bastante menos al femenino.
Si hiciésemos un ránking de deportistas históricos de Guadalajara, ¿quién tendría que estar a la cabeza?
Sonia Reyes.