De justicia para la cabecera del Tajo

11/10/2010 - 07:00 Redaccion

El pasasado 30 de septiembre se ponía fin a uno de los años hidrológicos más húmedos, y por tanto más favorables para el Tajo, de la última década. Las intensas precipitaciones registradas provocaban que la cabecera del Tajo cerrase uno de los mejores períodos en cuanto a sus reservas, que se encuentran al 60,5 por ciento de su capacidad, con un total de 6.667 hectómetros cúbicos. El 1 de octubre de 2009 el año hidrológico comenzaba con 168 hectómetros cúbicos almacenados en Entrepeñas y 206 en Buendía. Era una de las cotas más bajas motivadas por los continuos trasvases y la sequía registrada durante el año. Sin embargo, la tendencia se invirtió totalmente durante el otoño, invierno y primavera siguiente. A pesar de ello, Castilla-La Mancha no abandonó la lucha por una distribución racional del agua. De hecho, con la llegada del verano, como es habitual, se incrementó la demanda y las reservas de la cabecera del Tajo empezaron a descender vertiginosamente. A esta situación se sumaba la aprobación de la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo Segura de un trasvase de 230 hectómetros, con lo que la historia se repetía. De poco sirve que los pantanos presenten niveles óptimos si el trasvase se mantiene en las condiciones actuales. De ahí, el interés del Gobierno regional, con José María Barreda, a la cabeza, en participar en el control del reparto del agua. Parece que estamos en el punto inicial del cambio de tendencia en la cabecera del Tajo, que lucha por configurarse como un gran tanque de almacenamiento. Al menos así se contempla en el planteamiento realizado en el Plan de Ordenación del Territorio de Castilla-La Mancha que se reforzará con el anuncio del Gobierno de duplicar el caudal del río, lo que supondrá un aumento de las reservas de la cabecera y cuyos estudios ya se incluyen en el Plan de Cuenca. Esto significaría poder disponer de una reserva estratégica en los embalses de cabecera, una de las reivindicaciones históricas de los municipios ribereños. Aunque no se puede cantar victoria, sí se puede decir que estamos un poco más cerca de conseguir que se haga justicia con los pueblos de la cabecera.