Decepcionado estoy

27/02/2014 - 23:00 Luis Monje Ciruelo

Decepcionado estoy y con mi prestigio profesional por los suelos desde que he sabido que la Generalidad de Cataluña ha confeccionado una lista de periodistas desafectos al Régimen de Artur Mas y a mi no me ha incluido. ¿De qué me han servido los muchos comentarios críticos que le he dedicado en estas páginas, el último hace dos meses titulado “Mas, el Moisés catalán”? Cuando escribía en La Vanguardia Española (hoy sin el gentilicio) recibía muchas cartas de los lectores catalanes, más que desde Madrid por mis artículos en ABC. Esperaba, por tanto, recibir una más, aunque fuese desde la Generalidad y en catalán. A lo mejor la hubiese contestado en “mingaña”, el lenguaje de lo esquiladores de Fuentelsaz y Milmarcos. Es verdad que cuando Zapatero era presidente de la Nación tampoco hizo mucho caso de mis críticas, y eso que me metí con él en prosa y hasta en verso con un soneto a su sonrisa que no lo mejoraría ni Manuel Machado, autor del famoso soneto ”A Franco”. Éste es mi soneto, por si no se lo creen:
”¡Caudillo de esta era, Zapatero!
Señor de España que en tu fe renace,
sabe convencer, sonreír y hace/que nadie
a su Gobierno ponga un pero.
Por eso, que gobierne largo espero
a este rebaño borreguil que pace
sin que haya ni un indicio que rechace
su proyecto de paro crecedero.
Y este sumiso pueblo que le vota
no sé si con los pies o la cabeza
con su pastueño hacer nada denota
que hasta las gónadas esté de su torpeza (25/3/2011)
 
 Y añadía para los maliciosos: ”Cualquier parecido es pura coincidencia”.
 
Me gustaría saber si este desprecio a mis opiniones es porque soy un periodista provinciano, pero le recuerdo al presidente Mas que Guadalajara es tan provincia de España como Barcelona, aunque un poquito menos importante. Y ninguna de ambas capitales de provincia ha sido nunca, como Mas ha dicho de Barcelona, capital “de una antigua nación europea”. No me importaría mandar este artículo a La Vanguardia de hoy, como hice durante más de veinte años a La Vanguardia Española de ayer, pero no me lo publicarían. Me llenaría de gozo que lo hicieran, a ver si también me llevaban ante los jueces por usar la libertad de expresión y criticar la política de la Generalidad, como han hecho con varios colegas de dentro y fuera de Cataluña, acusados de anticatalanistas, cuando en realidad lo que somos es antiindependentistas y contrarios a las fantasías nacionalistas del presidente Mas.