Disfrutar del séptimo arte
01/10/2010 - 09:45
Editorial
Ayer era el día elegido para dar el pistoletazo de salida a una nueva edición del Festival de Cine Solidario de Guadalajara. Tras los últimos retoques en los pasados días, todo estaba preparado en el teatro auditorio Buero Vallejo de la capital para acoger la que será, al menos es lo que parece a simple vista, una de las mejores ediciones del Festival en lo que a la calidad de las cintas se refiere.
Más de 80 películas serán las que se proyecten hasta el próximo viernes en alguna de las ocho secciones previstas, cumpliendo así debida cuenta con nuestra semana más cinéfila. Será la edición más corta en duración y presupuesto de su historia, aunque la mejor en calidad de los trabajos presentados. Cinco días de buen cine frente a los 13 que llegó a alcanzar en su edición más larga. Y es que la crisis también se percibe en la gran pantalla. De los 85.000 euros previstos en junio para el festival no se ha llegado a los 72.000 euros de presupuesto, lo que sin embargo no ha impedido que la sexta edición se convierta en la de la ilusión y la imaginación, algo que no faltará e intentarán suplir la escasez de medios. Un jurado de lujo formado por la actriz Tina Sainz, el productor Larry Levene, la actriz Rosario Pardo, el actor Miguel Hermoso, la cineasta Cecilia Bartolomé y el director del Fescigu, Luis Moreno, será el encargado de otorgar el primer y segundo premio dentro de la Sección Oficial. Unos galardones que se presentan muy reñidos. Tanto como lo era ayer conseguir un buen sitio para poder ver a Vicente Aranda, director homenajeado de esta edición.
El Festival ya ha levantado el telón y aunque, en esta ocasión vuelve a las fechas tradicionales de su celebración y cambia de ubicación buscando ofrecer más espacio a los asistentes y mejor calidad de proyección, la esencia sigue siendo la misma: mantenerse como uno de los foros para los amantes del cine que traspasa las salas comerciales. Por delante quedan cuatro días para disfrutar, de otro modo, del séptimo arte.
El Festival ya ha levantado el telón y aunque, en esta ocasión vuelve a las fechas tradicionales de su celebración y cambia de ubicación buscando ofrecer más espacio a los asistentes y mejor calidad de proyección, la esencia sigue siendo la misma: mantenerse como uno de los foros para los amantes del cine que traspasa las salas comerciales. Por delante quedan cuatro días para disfrutar, de otro modo, del séptimo arte.