El abecedario de saber vivir

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por:
Cartas al director
VÍCTOR CORCOBA HERRERO / Madrid
Es tiempo de cambios. Hay que vivir de otra manera. Con otro abecedario más transparente y más directo al corazón. La vida, por si misma, es una alegría que muchos no alcanzan a vivirla. Esto sí que es una pena. Por ello, hacen falta sembradores de jovialidad, y tomar todos los días el pan del entusiasmo como alimento, virtud tan valiosa como necesaria, para no caer en la tristeza del camino. Se habla del motor económico mundial, de que algunas naciones industrializadas no consiguen arrancar, que otras se hunden en la crisis y que la pobreza aumenta, mientras se elude encender la ecuanimidad del ánimo como lenguaje a compartir, que es de lo que se trata en esta existencia, de donarse y darse.
La vida carece de sentido si no nos aporta satisfacciones. Éstas no se consiguen acumulando riquezas que es lo que muchos piensan. La estimación de los demás es lo que cuenta y cuenta en la medida de la donación. La solidaridad es el viejo y nuevo valor que nos debemos injertar en las acciones diarias. Hay mayor felicidad en dar que en recibir. Lo sabemos, pero se nos olvida practicarlo en todo momento y en todo lugar. Hay muchas personas que precisan reconstruir sus vidas y no encuentran manos donde sostenerse. Otras precisan que le salvemos de las injusticias, de la falta de libertades, de las redes ideológicas que predican el odio...Qué bien vendría aquí utilizar el abecedario del amor sin condiciones ni condicionantes, sabiendo que cuánto más compartimos más descubrimos nuestros genes comunes.
El mundo precisa de un inmenso abecedario renovador, capaz de hacer valer las palabras, sobre todo aquellas que nos hacen despertar como personas. Cada individuo forja su propia gloria. La de saber vivir es una hermosa tarea para alcanzarla, no es nada fácil, hay que invertir en fondos de humanidad y no resignarse a lenguajes vacíos ni encogerse de hombros ante los que amargan y desprecian hacer familia, hacer vida en definitiva.