El año de las carreteras

El Plan de Carreteras constituye una de las grandes apuestas de la Institución provincial para cohesionar la provincia. No en vano, uno de los grandes problemas de Guadalajara es su vasta y despoblada extensión, cruzada por pequeños municipios que suman hasta 400 ayuntamientos cuyas necesidades, sobre todo las de los más pequeños, deben ser satisfechas por la Diputación. Poseer una buena red de carreteras resulta fundamental para fijar población, para atraer nuevas empresas y para mejorar la calidad de vida de los habitantes del territorio guadalajareño. Así lo ha entendido la Diputación que, sólo el próximo año, invertirá cerca de 25 millones de euros en adecuar 250 kilómetros de la red provincial. El próximo viernes será aprobado este plan que, tras meses de estudio y años de tramitación, llega a su recta final con una inversión completa de más de 100 millones de euros. Aunque el plan prevé ser desarrollado en ocho años, durante la legislatura de Pérez León se actuará en más de 1.000 kilómetros de vías provinciales, apurando el 75 por ciento de la inversión total. Y es que a ambos lados de la A-2 y la CN-320 existen kilómetros y kilómetros de carreteras por las que a diario transitan centenares de vehículos. Entre ellos los de los carteros rurales, lo médicos y sanitarios, los panaderos y los profesores que mantienen activo el pulso vital de los pequeños municipios. Ganaderos, hortelanos, profesionales que eligieron la zona rural para vivir sin abandonar su trabajo en la urbe y turistas dispuestos a invertir -aunque sea en pequeñas cantidades- en nuestra provincia completan la lista de usuarios de las carreteras. Mantenerlas en buen estado de conservación es, en términos provinciales, ‘asunto de estado’.