El balón parado frena a un Dépor superior ante el Fuensalida

El Dépor tuvo que conformarse con un empate que sabe a poco tras ponerse hasta en dos ocasiones por delante en el marcador en un partido muy táctico y atractivo ante el Fuensalida, claro favorito de la categoría. El balón parado volvió a penalizar a las moradas en un encuentro entre los dos mejores equipos del campeonato, con estilos muy similares y un alto nivel futbolístico.

El conjunto alcarreño planteó un partido muy serio, esperando al rival en tres cuartos de campo, defendiendo con un bloque compacto y saliendo al contragolpe con criterio. El trabajo táctico del equipo fue sobresaliente, especialmente en el centro del campo, donde Irene Pérez, Vicky y Leire se adueñaron del juego. Por las bandas, Nerea y Bores ofrecieron profundidad y dominio, con una Nerea muy activa durante la primera mitad.

Cuando parecía que el descanso llegaría con igualdad en el marcador, un error en la salida de balón entre la defensa y la portera permitió al Fuensalida adelantarse. La reacción del Dépor fue inmediata: una internada de Nerea terminó en un pase al área que, tras un rechace, fue aprovechado por Sara para firmar el empate.

Tras la reanudación, Berta entró en lugar de Vicky y el Dépor dio un paso adelante, incorporando a más jugadoras al ataque. Bores comenzó a generar peligro constante por la izquierda y fue de nuevo Sara quien, dentro del área, firmó su segundo tanto del partido para volver a adelantar a las alcarreñas.

Sin embargo, una falta lateral mal defendida, especialmente en la colocación de la barrera, permitió al Fuensalida igualar nuevamente el encuentro. Lejos de venirse abajo, el Dépor volvió a tomar el control y, tras una gran jugada colectiva, Irene filtró un balón perfecto para Bores, que definió con gran calidad para poner el 3-2 y continuar con su excelente racha goleadora.

Con el partido controlado, el Fuensalida logró empatar otra vez a balón parado, castigando de nuevo a las moradas. A falta de diez minutos, el Dépor introdujo a Thalía por Leire con la clara intención de buscar el triunfo, pero en el tramo final ninguno de los dos equipos quiso asumir riesgos excesivos y ambos protegieron sus porterías.