El deporte provincial, de luto tras el fallecimiento de Antonio Murillo
Fue fundador y presidente del Club Atletismo Marchamalo, presidente del Club Deportivo Marchamalo –fútbol- y delegado de la Federación de Atletismo de Castilla-La Mancha. Falleció en Toledo a los 67 años.
El deporte provincial está de luto después de conocer el fallecimiento de Antonio Murillo, este martes, en el Hospital de Toledo. Murillo, vinculado al deporte en Marchamalo, sobre todo a los clubes de atletismo y fútbol, de los que fue presidente durante varios años y fundador del Club Atletismo Marchamalo, falleció a los 67 años.
En 1984 organizó el primer cross peña El Cazalla de Marchamalo, y en 1990 funda el Club Atletismo Marchamalo, del cual fue presidente hasta 2011.
Entre 1992 y 1997 fue nombrado delegado de la Federación Regional Atletismo, y representante de los atletas de Castilla-La Mancha, en la Real Federación Española de Atletismo. Durante ese periodo llegaría la organización de distintas pruebas con competidores de nivel nacional e internacional, como la Milla Internacional de Guadalajara, del Circuito Provincial de Guadalajara, la Media Maratón ‘Memorial Fernando Olalla’ entre los municipios de Marchamalo y Cabanillas, y la Milla ‘Fiesta del Atletismo Marchamalo’, que va camino de la mayoría de edad.
Como presidente del Club Atletismo Marchamalo llevó a esta entidad deportiva a sus más relevantes cotas de competición, reuniendo un importante elenco de atletas que llegaron a dominar el panorama nacional del cross. Numerosos keniatas pasaron por sus filas, donde crecieron como deportistas. Entre ellos destaca James Moiben, el más reconocido corredor formado en Guadalajara dentro del panorama nacional e internacional, que llegó a ser campeón de España y de Europa por equipos, y vencedor de varias maratones internacionales en China, Alemania y en Madrid.
Antonio siempre vio en el atletismo un vehículo fantástico para la trasmisión de los valores del deporte, la superación personal, el trabajo en equipo, el compañerismo y la solidaridad, tanto a los amantes del deporte como a los jóvenes, por lo que trató de unir el club con los estamentos oficiales y los centros de enseñanza. De ahí nacería la Milla ‘Fiesta del Atletismo de Marchamalo’, con participación de corredores de todas las edades.
Esta filosofía la trasladó a su trabajo en el Ayuntamiento de Marchamalo, donde fue elegido concejal tras la desanexión de la capital, en 1999, y también al Club Deportivo Marchamalo, donde fue presidente durante las temporadas 2008/2009 y 2009/2010. Su mandato en el club de fútbol de Marchamalo fue breve debido a su salud, quedando en el tintero un ambicioso proyecto para unificar entorno al club distintas disciplinas deportivas y el fomento de éstas entre los jóvenes de Marchamalo, siempre su último afán.