El órdago de Mas

26/11/2010 - 00:00 Fermín Bocos

Aunque las campañas electorales son la berrea de los partidos políticos, sorprende que Artur Mas, político de discurso posibilista, haya lanzado un órdago reclamando un Concierto Económico para Cataluña. Reclama una soberanía fiscal análoga a la que disfrutan en el País Vasco y Navarra. La plantea a modo de aviso a futuros socios (PP o PSOE) faltos de mayoría en el Parlamento estatal, pese a saber que para poder conseguir semejante objetivo habría que modificar la Constitución, proceso inalcanzable sin acuerdo previo entre PSOE y PP. Sabiendo que, hoy por hoy, semejante escenario es impensable, tiende uno a pensar que el órdago no es tal y estamos ante una simple proclama táctica destinada a enervar a su parroquia y no quedar rezagado respecto a ERC, su rival en el campo nacionalista. Sin cambio en la Constitución no se puede hablar con propiedad de "Concierto", y Mas, desde luego, lo sabe. Otra cosa es que juegue al equívoco y en circunstancias políticas favorables pudiera pactar con el PP o con el PSOE para conseguir algún tipo de acuerdo fiscal ventajoso para Cataluña. Mas, a quien las encuestas dan gran ventaja respecto del PSOE, se sabe en la agenda de Rajoy, pero también en la de Rubalcaba quien, hablando de las encuestas que pronostican el desplome de los socialistas, quizá para consolarse, se vuelve taurófilo y recuerda aquello de que hasta el rabo todo es toro. Mas pide la luna, pero aceptaría de buen grado un planeta algo más modesto, entre otras cosas porque no ignora que sin necesidad de modificar la Constitución, lo que podría cambiar es la Ley Electoral, ley asimétrica que permite que fuerzas políticas como CiU o el PNV, con menos votos que IU o UPyD (Rosa Díez), tengan más diputados en el Parlamento estatal. Cada vez que alguien utiliza la palabra hay que echarse mano a la cartera por lo que pueda pasar, y encima si lo dices corres el riesgo de que te cuelguen a ti el sambenito. Según el diccionario de la Real academia "Patriota" es la persona que tiene amor a su patria y procura todo su bien. Así que... a aplicarse el cuento y todo lo demás son simples cuentos y el país no está para bromas.