Este año, mejor alquitrán

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

EL COMENTARIO
Nuria Fernández - Periodista
Uenas noticias. Los reyes magos vendrán este año a Guadalajara cargados de…alquitrán. No, que nadie se asuste, también traerán los tradicionales juguetes y regalos e incluso, si es posible, un poco de optimismo para acabar con la “mala baba” que a todos nos invade con este rollo de la crisis.
Pero, además, tendrán que venir desde Oriente con toneladas y toneladas de alquitrán. De ello se han encargado los representantes de la Diputación Provincial que por esta vez, y esperamos que lo hagan muy a menudo, se han puesto de acuerdo para pedir en su carta a los Reyes Magos unas carreteras nuevas para la provincia de Guadalajara. Eso es lo que les gustaría pero en la posdata, como hacen los niños pequeños en sus misivas a los magos de Oriente, han dejado claro que si eso no puede ser, pues que arreglen las que tenemos ahora y que queden como nuevas. ¡Por fin! Eso sí que es un sueño para cualquier alcalde de un pueblo pequeño e incluso para los vecinos que sufren y padecen carreteras con trazados imposibles y con baches poco aptos para un turismo normal y corriente. Ha costado esfuerzo, pero hay que reconocer el trabajo que en estos meses han realizado todos los diputados con la presidenta a la cabeza, para sacar adelante este Plan Provincial de Carreteras que va a conseguir que nuestros pueblos sean más accesibles.
La noticia no puede ser mejor, en diez días se firmarán los contratos y ¡a trabajar! que hay mucho que hacer, nada menos que repasar 250 kilómetros en el año 2009.
En este año que está a punto de terminar, la Diputación se ha encargado de arreglar 64 kilómetros de carretera en la zona de Yunquera, Malaguilla y también Campillo de Ranas, sin embargo, al menos en esta última localidad, no se puede decir que el arreglo haya sido exitoso. Después de gastar casi 800.000 euros en una carretera muy deteriorada, en apenas un par de meses los baches han vuelto a aparecer, son pocos pero de gran tamaño y lo más importante, inadmisibles en una obra que se acaba de terminar. Esperemos que la Diputación no dé la obra por concluida y exija su arreglo, porque ese es el gran riesgo del nuevo Plan de Carreteras: que el arreglo no sea tan duradero como los pueblos desean. La presidenta de la Diputación, María Antonia Pérez León, ha asegurado que se va a montar un dispositivo específico para llevar un control riguroso del desarrollo de la obra. Esperemos que entre otras muchas cosas ese dispositivo vigile que se trabaje rápido, bien y sobre todo con garantías para que no ocurra lo mismo que ya está pasando en la GU-186.