González al PSOE: "Levántate y anda"
02/10/2011 - 00:00
Jesucristo ordenó a Lázaro resurrección y camino; lo consiguió porque era Dios y porque además le iba en ello su prestigio. El PSOE es un cadáver político que espera el certificado de defunción para el 20-N.
Y Felipe González le ha mandado resucitar antes de la muerte oficial. Es un intento desesperado de quien se fue y no está, pero quiere volver para estar sin formar parte más que como agitador
circunstancial del PSOE.
Felipe ha aceptado las ofertas recibidas para pasar los años de vida que le queden podando bonsáis, asistiendo a consejos de administración y gozando de su familia. Legítimo. Pero esas dedicaciones -sobre todo las de los consejos de administración- son un lastre para la agitación de masas. Y él alivia su conciencia con su presencia como estremecimiento de la militancia.
Se da la circunstancia de que Zapatero ha tenido que recurrir a los
que siempre marginó. Es sabido que Zapatero no llamaba a González
porque el ex presidente lo ha contado. No quería saber de nadie de
aquella época y al final los habitantes de aquellos tiempos son los
que pretenden salvar al PSOE del estado cataléptico en que ha quedado.
Estamos en plena ebullición de la Conferencia Política del PSOE. Un
remedo de lo que debería ser un congreso.
En este tipo de acontecimientos puede hablar cualquiera, no se vota y todo está diseñado para mayor gloria del candidato designado a dedo.
Son los últimos tiempos de este PSOE. Lo que tiene que ocurrir es una
reconversión brutal que devuelva al socialismo español a la dignidad
que le corresponde. Esa gran transmutación necesita mucho más que un
grito desesperado de González para que el PSOE se levante y camine.
Felipe fue un magnífico presidente, pero nunca ha sido dios aunque
Txiki Benegas le llamará así. De momento, el PSOE ni se ha moviden lo peor de la crisis y como no le hizo ni caso? Sin duda, se le debe haber olvidado.