Hace un año

19/03/2021 - 10:51 Marta Velasco

El gobierno decretó el estado de alarma con confinamiento total, pensamos que serían quince días, pero dudó casi tres meses.

Hace ya un año que nos confinaron y ha pasado sin darnos tregua ni respiro. Al principio todo fue confusión. Enfermaron amigos muy queridos y en el triste mes de marzo perdimos a uno de los mejores. Murieron tantos ancianos que ni siquiera Illa o Simón, los encargados de las cuentas, recuerdan la cifra exacta… ¡Era una pandemia! Ni los más viejos habíamos conocido algo así, fue como regresar a la Edad Media. 

El gobierno decretó el estado de alarma con confinamiento total, pensamos que serían quince días, pero dudó casi tres meses. Salíamos por las ciudades vacías, silenciosas, a hacer la compra con aprensión, sin mascarillas, porque no había, con los guantes de fregar platos, y a la vuelta, dejábamos los zapatos fuera, limpiando todo con lejía. Luego nos fuimos acostumbrando al trabajo telemático, a la ventana abierta de la televisión y vimos series estupendas, leímos mucho, hicimos platos exquisitos, engordamos.  Salíamos a la terraza a aplaudir a los héroes que nos cuidaban y a ver de lejos a los vecinos. En las calles, a falta de ciudadanos, paseaban jabalíes, corzos y pavos reales, estábamos en primavera y olía toda la casa a hierba, a pinos… En julio el presidente aseguró que habíamos vencido al virus y que podíamos irnos a veranear. Nos fuimos contentos a Sigüenza, donde podíamos andar por el pinar y tomar una cerveza en la Alameda.

A la vuelta del verano, el virus derrotado se descontroló, comenzó este segundo estado de alarma, y perdimos a otro de nuestros amigos. Hoy parece que los casos disminuyen, está en marcha la vacunación, aunque va muy lenta por falta de vacunas. La incertidumbre es terrible, no saber cuándo acabará, cuándo estaremos todos inmunizados. 

Me alegro de que mi madre no haya vivido esta época, ella nos decía “qué pena me dais, con tantos aparatos y esa vida tan rara”, pero esta pandemia hubiera sido insufrible sin esperar a mi hija cada tarde en la pantalla de la tablet, sin hablar con mi hermana de vez en cuando, sin un WhatsApp de mis nietos, sin el chat de Viejas glorias, sin un teléfono a media noche que me comunique con las rubias de bote. 

    El gobierno y los partidos se han esforzado para entretenernos, con un poco de humor para que no nos aburriésemos en esta tribulación. Impagable la vis cómica de la portavoz, hemos visto peleas, derroche en niñeras, mociones de censura, dramas y performances para disfrute del ciudadano. Ábalos dice que él solo cree en la honradez … Iglesias ha desaparecido ladinamente como vicepresidente, preparando una aparición fulgurante como candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid. Y Sánchez, como Buster Keaton, Cara de Palo.

En la Comunidad de Madrid hay una pequeña revolución, pero estamos tranquilos porque Isabel Díaz Ayuso es una mujer valiente y le ha dicho al rey: “Todo en orden”. Ella, al contrario que los demás, suele decir la verdad. Porque es  necesario salvar Madrid.