Jueces tontos del haba

15/03/2011 - 00:00 Luis del Val

Yo nunca me atrevería a calificar a un colectivo de jueces como jueces tontos del haba, porque a pesar del derecho a la libre expresión que tenemos los ciudadanos de los países libres denominar a un grupo de jueces tontos del haba me parece que salta la linde de la libertad de expresión para entrar dentro del campo de las injurias. Y, mucho menos, me atrevería a afirmar que los jueces del Tribunal de Estrasburgo, son mentecatos por parte de padre, estúpidos de génesis materna, necios por méritos propios, o botarates por sus acciones. Nunca se me ocurriría tamaño dislate, de la misma manera que jamás pienso que nadie me pille publicando que los jueces del Tribunal de Estrasburgo son tardos de postín, ruines de escalafón, incompetentes de currículo e indoctos de vocación. A mí los jueces del Tribunal de Estrasburgo me producen mucho respeto y no les voy a insultar, a pesar de que ellos se han permitido insultar a mi inteligencia al condenar al Estado español a que recompense al ciudadano Arnaldo Otegui con 20.000 euros por haberle condenado, tras afirmar públicamente que el Rey de España era el jefe de los torturadores, porque el Estado español incumplió los límites de la libertad de expresión. Es decir, que el compañero de viaje y amigo, no de los que torturan, sino de los que asesinan con un tiro en la nuca, se le somete a una temible vejación cuando no se le permite que al Jefe del Estado en el que sus ciudadanos son asesinados se le insulte como jefe de los torturadores. El Tribunal Europeo comenzó a funcionar el 1 de noviembre de 1998 y sus miembros me merecen mucho respeto. Sólo espero que ellos no sean víctimas de la libertad de expresión y, algún día, a alguien se le ocurra afirmar que sus madres se dedicaban a la prostitución y, por tanto, ellos son unos hijos de puta. Porque, si se enfadaran y condenaran, igual tenían que indemnizar con 20.000 euros al injuriador, y quedarían como unos jueces tontos del haba .