La concatedral recupera su esplendor

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Editorial
La concatedral de Santa María está de aniversario. El 15 de agosto de 1959 el templo de Santa María era consagrado y desde entonces contaría con rango de catedral, mérito que comparte con Sigüenza.
Entonces, la iglesia se sometía a una remodelación que le devolvería su mejor cara, que hoy, medio siglo después, vuelve a repetirse (se trata de una obra integral de acondicionamiento que supondrá el fin de la tercera fase de trabajos en la iglesia, unas obras iniciadas hace tiempo). Por eso, la verdadera celebración de los 50 años de la concatedral se llevará a cabo con un intenso programa de actividades, ahora incipiente, que se intensificará después de la Semana Santa de 2010, fecha en la que está previsto que Santa María reabra sus puertas al culto. Pero mientras, desde la Diócesis se ha decidido abrir las puertas del templo, que cerró el pasado mes de julio. A lo largo de toda la jornada de ayer se pudieron observar los trabajos que se están desarrollando. Durante la realización de las catas arqueológicas, se descubrieron importantes tesoros patrimoniales ocultos entre las paredes y suelos. Se ha sacado a la luz un arco renacentista del siglo XVI, que se localiza en la entrada del antiguo baptisterio y otro arco de entrada a la capilla de los Guzmán, también fechado en el siglo XVI. Además de estos dos arcos, las obras también han servido para destapar tres tumbas medievales que serán estudiadas y datadas antes de volver a cerrarse. Mientras eso ocurre, los más interesados en conocer cada rincón de Santa María han podido observar, este fin de semana, cómo se desarrollan las obras y cómo la iglesia recupera todo su esplendor. Algo que se hacía necesario si tenemos en cuenta que la catedral de Sigüenza ha sido desde hace años el templo al que se ha destinado las mayores partidas económicas por entender que su valor artístico es inigualable.