La difícil financiación local

Se trataba de una norma que nadie conocía y que saltaba a la luz una vez que se publicaba en el Boletín Oficial del Estado. Las presiones del ámbito municipal surtían su efecto y el Gobierno rectificaba publicando en el BOE una corrección para retrasar hasta enero de 2011 la prohibición a los ayuntamientos de endeudarse a largo plazo. Por lo tanto, a partir del 1 de enero de 2011, y hasta el 31 de diciembre de ese mismo año, ni las entidades locales ni sus entidades dependientes clasificadas en el sector de las Administraciones Públicas podrán acudir al crédito público o privado a largo plazo, en cualquiera de sus modalidades, para financiar sus inversiones. Los ayuntamientos respiraban, un poco más tranquilos, evitando medidas adoptadas in extremis, como el Pleno que convocaba el mismo lunes, con carácter de urgencia, la Diputación para aprobar la licitación de siete préstamos que le permitirán obtener los 35 millones necesarios para continuar con los trabajos del Plan de Carreteras. La jugada, ya no se hacía imprescindible, y eso es lo que ayer explicaba Rafael Esteban quien comparecía públicamente junto a otros tres de los cuatro vicepresidentes, Jesús Recuero, Teresa Tejedor y Julio García. Ya no hay tanta prisa. Los municipios y corporaciones locales tendrán siete meses por delante para solicitar créditos públicos o privados a largo plazo que les ayuden a financiar sus proyectos. Aunque la situación sigue siendo igual de difícil, al menos, los Consistorios dispondrán de meses para planificar cómo les afecta la aplicación de esta medida, algo que, sin embargo, no soluciona los problemas de financiación.

Al igual que pasara con el primer Plan E no había tiempo para reflexionar ni para nada. Pero, cuál será la sorpresa que el martes por la mañana se hace pública una corrección de la citada norma. Ahora las corporaciones locales se podrán endeudar hasta el 31 de diciembre de 2010.