La procesionaria en el Alto Tajo

29/04/2018 - 13:01 Maru Laguna Esteban

 Por las carreteras caminan en procesión como culebras finísimas de más de un metro de largas, las orugas o gusanos (o lo que sean).

La pasada semana visité junto con mis amigos Adolfo y Pili el Parque Natural del Alto Tajo (zona de la laguna de Taravilla, el salto de Poveda y Peralejos). El disfrute de los arroyos cantarines, bramido del Tajo en su aumento notable de caudal, espuma blanquísima en la cascada, roquedas, barrancos y otras preciosidades naturales. Ha sido inmenso.
 Pero la tristeza nos invadió al contemplar cientos de pinos que se están secando sin remedio por el ataque de la procesionaria, de cuyas ramas cuelgan los enormes capullos de dicha plaga. También por las carreteras caminan en procesión como culebras finísimas de más de un metro de largas, las orugas o gusanos (o lo que sean), que ya han eclosionado y avanzan por el suelo buscando árboles sanos para invadirlos y secarlos.
  Aunque supongo que los agentes forestales y quienes tienen asignada la conservación del parque ya están enterados de la plaga y actúan en consecuencia quiero con estas líneas manifestar mi preocupación e inquietud por la muerte de tanto pino en nuestro querido parque.