La romería de Barbatona
Seguramente haya sido la de 2020 la ocasión en que más cantidad de fieles hayan visto la imagen de la Virgen de la Salud gracias a la retransmisión por una cadena de televisión nacional, TreceTV,
La crisis sanitaria del Covid-19 ha impedido celebrar, también, la romería más popular y multitudinaria de cuantas tienen lugar en la provincia de Guadalajara con asistencia de miles de personas llegadas desde los más diversos lugares del entorno. La cita, en la explanada de la pedanía seguntina de Barbatona, es uno de esos actos marcados del calendario provincial. Desde 1965 nunca se había dejado de peregrinar con la excepción de 1970 cuando la imposibilidad por causa meteorológica obligó a oficiar la eucaristía en el interior, eso sí, en loor de multitudes. Ahora bien, seguramente haya sido la de 2020 la ocasión en que más cantidad de fieles hayan visto la imagen de la Virgen de la Salud gracias a la retransmisión por una cadena de televisión nacional, TreceTV, de la misa del mediodía. Fue una ceremonia sencilla, con apenas unos cuantos sacerdotes, varios representantes de la antiquísima cofradía, la alcaldesa seguntina, María Jesús Merino, y el obispo diocesano, don Atilano, con cuya presencia se cumple la tradición de que nunca ninguna edición ha dejado de estar presidida por un prelado, incluso en ocasiones por arzobispos o nuncios. Su homilía fue directa al corazón. ¿Qué mejor momento para invocar a la venerada Virgen de la Salud que cuando una pandemia está causando cientos de miles de muertos en todo el mundo?
Este domingo, el segundo de mayo, su gran día, no se movió de su hornacina, no subieron a su camerino centenares de romeros para besar su manto o la media luna, pero recibió más interpelaciones que nunca en su historia. Nos gustó la misa, nos emocionó recibir mensajes de tantas personas con las que compartimos el cariño a esta advocación mariana, recordamos momentos vividos en este bello pueblo serrano desde nuestra niñez y que sigue siendo lugar de culto cada domingo junto a la familia en los meses del estío. El día de la romería de Barbatona fue siempre aquel en el que se abría la casa del veraneo para los frecuentes desplazamientos de fin de semana, fecha de inicio del tiempo más feliz de cada año, el de las vacaciones. El coronavirus, esa plaga que pasará a la historia de la humanidad como uno de sus episodios terribles, solo será un paréntesis en nuestra vida. Hoy le pedimos a la Virgen el final de la enfermedad y que allá en el otro mundo cuide de todas las víctimas de la misma, de la alcaldesa de Barbatona, Emilia Domínguez Del Amo, y de nuestros seres queridos.