La siega y la trilla en Muduex

08/02/2014 - 23:00 Gonzalo Abad

bundando hacia el pasado más cercano, en relación a Muduex, en nuestro pueblo vivíamos de la agricultura, más o menos, con ganado como eran ovejas o cabras y las hortalizas. En Muduex, en tiempos, se hacía casi todo a mano. Yo me acuerdo que venían bastantes segadores de fuera, peones como así les llamábamos. Eran extremeños, manchegos, murcianos. Estos hombres compartían las cuadrillas para unos vecinos u otros. Cuando se reunían por la noche, después de haber efectuado la jornada del día, de lo que más hablaban era del trato que había tenido cada uno, a nivel de manutención, etc. A partir de los años sesenta, iba viniendo ya alguna cosechadora. Puedo decir y casi lo confirmo, al 95%, que casi todos nos esmerábamos lo mejor que podíamos, ya que el trabajo se lo dejaban de sobra, pero la comida también. Para estos hombres era más duro que para nosotros los del pueblo, ya que tenían que hacer casi todos los días, casi hora y media de camino andando y cuando salían del pueblo tenían que subir una cuesta bastante larga y pendiente. Cuando estos segadores querían marcharse a otros pueblos para buscar siega, me acuerdo que mi madre les tenía preparado un pan grande abierto por medio, con tajadas de chorizo para que comieran si no encontraban tajo para segar, lo mismo que hacia mi propia mujer. En relación a como se hacía la siega, era, como decía antes, casi todo a mano. Ahora voy a hablar del acarreo y trilla de la mies. La mies la traíamos con los carros y algún que otro camión. Los que lo hacían con carros se levantaban a las tres de la mañana de la hora solar de entonces para hacer tres viajes al día, ya que tenían que hacer muchos kilómetros por carretera. Después de haber traído la mies a las eras, venía la trilla, que entre una cosa y la otra resultaba una campaña bastante larga y sí era un verano de tormentas se alargaba aún más la faena. Cuando se empezaba a trillar, se recogía la parva por las tardes para arbolarla al día siguiente por la mañana, para separar la paja del grano. Todo esto también se hacía muy de madrugada ya que teníamos que meter el grano a las cámaras y preparar la parva para trillarla ese mismo día. Todo esto lo hacíamos antes del almuerzo y después a trillar. Había quien la arbolada con su alberladora pero otros lo hacíamos a mano. Los que lo hacíamos a mano, los teníamos