La sombra de un nuevo trasvase
01/10/2010 - 09:45
EDITORIAL
La reserva de agua de los embalses de la cabecera del Tajo aumentaba en la última semana un hectómetros cúbico hasta situarse en 392, el 15,84 por ciento de su capacidad global, que es de 2.474 hectómetros cúbicos.
Sin embargo, y a pesar de las lluvias registradas durante la primera mitad del mes de junio, los pueblos ribereños no respiran tranquilos. Sobre todo porque la máxima de a más aguas en la cabecera del Tajo, más agua para Murcia parece no tener fin. Ayer, la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo-Segura acordaba proponer al Consejo de Ministros que autorice un envío de agua de 75,5 hectómetros cúbicos desde el Tajo a la cuenca del Segura, 40 de ellos para abastecimiento y los otros 35,5 para regadío. El mensaje que el presidente regional, José María Barreda lanzaba hace a penas unos días con motivo de la celebración del Día de Honor de Castilla-La Mancha en Expo Zaragoza no parece haber calado en Murcia. El lema Agua sí para todos, para todo, no, no puede ser más rotundo. Agua para el consumo, sí, para regadío, no. Por eso, no se entiende que la Comisión proponga casi la mitad de la petición para regar la zona de la Cuenca del Segura. Un trasvase es ahora imprudente, injustificado e innecesario, más aún si se tienen en cuenta las actuales condiciones de excepcionalidad que viven los pantanos de cabecera del Tajo tras tres años consecutivos de sequía y los altos niveles de lluvia registrados en la costa levantina. Resulta esperpéntico pensar que, por haberse alejado la cabecera del Tajo de los 240 hectómetros que marcan el límite legal para trasvasar, se pueda empezar a enviar agua para regadío. La situación no es mucho mejor que el pasado 28 de marzo cuando el Consejo de Ministros, con buen criterio, aprobaba un trasvase sólo para el consumo humano. Un buen criterio que, parece, no se repetirá el próximo viernes ante la sombra de lo que será un nuevo trasvase.